Archivo de la Categoría ‘Economía española’

19
Feb
WP_Post Object
(
    [ID] => 4444
    [post_author] => 115
    [post_date] => 2007-02-19 17:26:48
    [post_date_gmt] => 2007-02-19 16:26:48
    [post_content] => Hoy se presentó en Madrid el llamado Índice de libertad económica, que elaboran desde hace 13 años The Wall Street Journal y The Heritage Foundation. Este índice es el resultado de un estudio que muestra, de manera ordenada y comparativa, la libertad económica de que gozan los habitantes para realizar sus actividades, resultante de las políticas económicas seguidas por 157 países durante los últimos años. Una primera conclusión del trabajo es que identifica una relación directa entre la mayor libertad económica y el bienestar que tienen los habitantes del país, medido por el ingreso per cápita. Esto significa que aquellos países que tienen mayor cantidad de restricciones a la actividad económica o una mayor intervención de los respectivos gobiernos, provocan un menor nivel de vida a sus habitantes. Una segunda conclusión que el estudio encuentra es que incrementos en la libertad económica se identifican con crecimiento económico de las respectivas naciones. Aunque esto parece obvio, son muy numerosos los analistas y los políticos que piensan y actúan en sentido contrario, perjudicando a la mayoría de la población.


Para la elaboración de este índice de libertad económica se identificaron una serie de variables independientes agrupadas en diez categorías, en donde destacan la apertura comercial, el peso fiscal del gobierno, así como su intervención en la economía, la política monetaria, las restricciones a los flujos de capital, el sistema financiero, los sueldos y los precios, los derechos de propiedad, las regulaciones y la actividad del mercado informal. En el estudio se le asigna la misma ponderación -esto es la misma importancia- a cada una de las categorías. Hong-Kong, Singapur, Australia, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Gran Bretaña, Irlanda y Suiza son las economía del mundo que tiene un mayor grado de libertad económica según la última edición del informe que acaba de publicar The Wall Street Journal y The Heritage Foundation (2007 Index of Economic Freedom). Los últimos puestos son para Libia, Cuba y Corea del Norte (3 dictaduras). El estudio de The Wall Street Journal y Heritage Foundation mide el grado de libertad económica que tienen los países analizando una serie de componentes: tamaño del gobierno (ingresos y gastos públicos, empresas públicas), estructura legal y seguridad de los derechos de propiedad, política monetaria ortodoxa y acceso al crédito, grado de libertad para realizar comercio exterior, nivel de corrupción y, por último, marco de regulaciones laborales y de negocios.

España, la octava economía del mundo, figura en el Index of Economic Freedom  de The Wall Street Journal  y la Heritage Foundation en el puesto número 27 de la clasificación global frente al puesto 33 del año pasado. A pesar de la mejora, el estudio sitúa como los tres puntos flacos de la economía española la falta de flexibilidad en mercado laboral, la falta de control del gasto público y la alta presión fiscal. Es decir, pese a los esfuerzos por reducir la tributación directa en España, en los últimos años, seguimos teniendo una presión fiscal elevada. El aspecto que recibe una peor valoración en España es el relativo al papel del  gobierno en la libertad económica. Los dos aspectos mejor valorados son el relativo a política monetaria (que como se sabe la realiza el BCE) y el relativo a libertad financiera.

Chile, en el puesto 11, es la economía latinoamericana con un mayor grado de libertad económica. En segundo lugar, se sitúan, en Latinoamérica, Panamá (puesto 47) y México (49),  Perú se sitúa el puesto 63, Brasil en el 70 y Argentina en el 95, sobre un total de 157 países considerados en el estudio. Venezuela, en el lugar 144, es el país con menos libertad económica de América Latina, después de Cuba (156 de un total de 157 en el mundo). Parece que estos 2 países tambien están hermanados en su falta de libertad económica. Bolivia ocupa el 112 y  Ecuador 108. Chile (11 del mundo) se sale del conjunto de América Latina porque tiene un grado completo de inversión, no hay corrupción y se le reconoce como el iniciador de un modelo económico que da las cotas de libertad más altas en la región.

Este índice de libertad económica es importante porque a mayor libertad económica, menor riesgo de corrupción.  La mayor libertad de expresión y democracia y un papel más pequeño del Estado en la economía reducen las posibilidades de corrupción. Los países donde hace falta dar "coimas" en distintos niveles tienen menor libertad económica y también encarecen el costo de invertir o trabajar en ese lugar.




    [post_title] => Índice de libertad económica (Index of Economic Freedom)
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => indice_de_liber_1
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2007-02-19 17:26:48
    [post_modified_gmt] => 2007-02-19 16:26:48
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/02/indice_de_liber_1.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 2
    [filter] => raw
)

Hoy se presentó en Madrid el llamado Índice de libertad económica, que elaboran desde hace 13 años The Wall Street Journal y The Heritage Foundation. Este índice es el resultado de un estudio que muestra, de manera ordenada y comparativa, la libertad económica de que gozan los habitantes para realizar sus actividades, resultante de las políticas económicas seguidas por 157 países durante los últimos años. Una primera conclusión del trabajo es que identifica una relación directa entre la mayor libertad económica y el bienestar que tienen los habitantes del país, medido por el ingreso per cápita. Esto significa que aquellos países que tienen mayor cantidad de restricciones a la actividad económica o una mayor intervención de los respectivos gobiernos, provocan un menor nivel de vida a sus habitantes. Una segunda conclusión que el estudio encuentra es que incrementos en la libertad económica se identifican con crecimiento económico de las respectivas naciones. Aunque esto parece obvio, son muy numerosos los analistas y los políticos que piensan y actúan en sentido contrario, perjudicando a la mayoría de la población.

Seguir leyendo…

13
Feb

Convergencia real

Escrito el 13 febrero 2007 por Javier Carrillo en Economía española

WP_Post Object
(
    [ID] => 4438
    [post_author] => 28818
    [post_date] => 2007-02-13 13:15:47
    [post_date_gmt] => 2007-02-13 12:15:47
    [post_content] => Según el indicador avanzado presentado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Producto Interior Bruto (PIB) de España creció un 3,8% en 2006, frente a la expansión del 3,5% experimentada en 2005. Por su parte, el PIB de la zona euro aumentó un 2,7% en 2006, lo que supone una aceleración de 1,3 puntos con respecto al 1,4% registrado en 2005. Por lo tanto, nuestro diferencial de crecimiento con la zona euro se ha reducido desde los 2,1 puntos de 2005 hasta algo más de 1 punto en 2006.

La importancia de estas cifras reside en su estrecho vínculo con el que debería ser el principal objetivo de la política económica española: la convergencia real con las economías más ricas de Europa.


Hay que tener presente que cuando hablamos de convergencia real, estamos haciendo referencia a la persecución de un “objetivo móvil”. La renta media española, medida en términos de PIB por habitante en paridad de poder de compra, equivale en estos momentos a un 93% del promedio (100%) de la UEM. Evidentemente, si España quiere alcanzar ese nivel promedio, debe crecer de manera consistente por encima de las tasas a las que a su vez crecen las economías a las que nos queremos aproximar. Esto ha sido así en los últimos 15 años, con la única excepción de los años 1992 a 1994. Por lo tanto, para lograr la convergencia real en unos plazos razonables, resulta fundamental mantener un ritmo de acercamiento adecuado.

El diferencial de inflación que presenta la economía española frente a las economías europeas es un obstáculo fundamental en nuestro camino. Unos precios que crecen consistentemente a tasas en torno a un 1% por encima de las de nuestros principales socios comerciales, que no son compensadas con mejoras de productividad y que dentro del gran mercado europeo ya no pueden ser aliviadas mediante el tipo de cambio, deterioran inexorablemente la competitividad de nuestros productos y con ello nuestras posibilidades de un mayor crecimiento futuro. La paradoja reside en que, al tiempo, este diferencial en la inflación puede ser consecuencia en buena parte de nuestro mayor ritmo de crecimiento. Apoyaría esta afirmación el llamado efecto Balassa-Samuelson, que considera el impacto de los incrementos salariales en los sectores de bienes “no comercializables” causados por incrementos relativos mayores en la productividad de los sectores de bienes “comercializables” o expuestos a la competencia exterior. Sin embargo, la caída relativa de la productividad del trabajo y total española frente a la europea en los últimos años no parece dar soporte a esta hipótesis. Parece más adecuado vincular mayor crecimiento y diferencial de inflación a otras razones, como la mayor demanda de servicios (no expuestos a la competencia exterior) a medida que crece la renta de las familias, o a la propia falta de competencia interna en este sector.

Como es bien sabido, el crecimiento del PIB por habitante de un país es el resultado de los crecimientos de su productividad, tasa ocupación y tasa de actividad. Nuestra convergencia real está basada en la actualidad casi exclusivamente en el crecimiento del empleo. Si bien nuestras posibilidades de mejora en las tasas de ocupación y de actividad son aún considerables, el crecimiento del empleo debería venir acompañado de un crecimiento de la productividad, si es que España pretende la convergencia real sin perder competitividad por su inflación diferencial. Estas mejoras en la productividad tan sólo pueden ser ganadas mediante un mayor esfuerzo en mejorar la eficiencia del factor trabajo, la eficiencia del factor capital, y la eficiencia del sistema económico en el que ambos se desenvuelven.

Sólo trabajando en estos frentes veremos mejorar nuestros datos de inflación y podremos mantener un diferencial de crecimiento económico sostenible, que garantice la convergencia real de la economía española con la de los países más ricos de Europa en un plazo razonable.

    [post_title] => Convergencia real
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => malas_noticias
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2023-12-13 13:42:35
    [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:42:35
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/02/malas_noticias.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 4
    [filter] => raw
)

Según el indicador avanzado presentado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Producto Interior Bruto (PIB) de España creció un 3,8% en 2006, frente a la expansión del 3,5% experimentada en 2005. Por su parte, el PIB de la zona euro aumentó un 2,7% en 2006, lo que supone una aceleración de 1,3 puntos con respecto al 1,4% registrado en 2005. Por lo tanto, nuestro diferencial de crecimiento con la zona euro se ha reducido desde los 2,1 puntos de 2005 hasta algo más de 1 punto en 2006.

La importancia de estas cifras reside en su estrecho vínculo con el que debería ser el principal objetivo de la política económica española: la convergencia real con las economías más ricas de Europa.

Seguir leyendo…

12
Feb
WP_Post Object
(
    [ID] => 4437
    [post_author] => 115
    [post_date] => 2007-02-12 10:02:36
    [post_date_gmt] => 2007-02-12 09:02:36
    [post_content] => ¿Qué son las instituciones? ¿Qué papel juegan en el crecimiento económico? ¿De que depende el crecimiento económico de los países pobres? ¿Por qué ellos son pobres y nosotros ricos? Durante años, los economistas hicimos mucho hincapié en la importancia de contar con una buena política económica para alcanzar niveles altos de desarrollo económico (lucha contra la inflación, equilibrio presupuestario, grado de apertura comercial, sistema flexible del tipo de cambio, etc.). Sin embargo, recientemente los economistas nos hemos dado cuenta de que son las instituciones las que consiguen mejorar el crecimiento de la productividad y, por tanto, el  desarrollo económico. De ahí que cada vez más, la ciencia económica esté incorporando a su acervo científico un mejor entendimiento del papel de las instituciones (como son los sistemas políticos libres y, por tanto,  democráticos, los mercados de libre competencia, el buen funcionamiento del Estado de Derecho, los derechos de propiedad bien especificados y reforzados) como la clave del éxito económico y del buen funcionamiento de las economías. Ahora, en economía, lo ortodoxo es recalcar la importancia de que las instituciones sean propicias al crecimiento económico como, por ejemplo, la estabilidad política, la seguridad jurídica, la independencia del poder judicial y el buen funcionamiento de los sistemas legales, los patrones de ocupación de tierras, la independencia del banco central, la transparencia y baja corrupción de los gobiernos y las empresas (Siemens, por ejemplo, está siendo investigada por sobornos, una investigación  internacional por supuesta corrupción en el conglomerado alemán), que los organismos reguladores sean creíbles e independientes, etc.


Los países ricos son ricos porque habitualmente cuentan con una buena política económica, instituciones creíbles y estables pero también con una geografía favorable, mientras que la valoración de estos tres factores para muchos de los países más pobres del mundo es negativa. Un trabajo reciente de William Easterly, del Centro de Desarrollo Global, y Ross Levine, de la Universidad de Minnesota, en el que se evalúa la importancia de estos tres factores en 72 países ricos y pobres señala que son las instituciones el factor más importante. Según el citado estudio, la geografía y la política por sí solas no sólo son menos importantes que las instituciones sino que, en líneas generales, no tienen ninguna importancia. Pero una geografía favorable fomenta el que las instituciones sean buenas y, a su vez, éstas promueven el desarrollo. Un país con una mala geografía y buenas instituciones (Chile, Australia y Nueva Zelanda) irá bien, pero un país con una buena geografía y malas instituciones como Argentina y Cuba no. Los países con buenas instituciones suelen ir bien, sean sus políticas o su geografía  buenas o malas

¿Afecta la geografía al desarrollo económico? ¿O no? ¿Por qué normalmente una buena geografía ayuda a que las instituciones sean buenas? ¿Qué crees que es más importante para el desarrollo económico de un país las políticas económicas ortodoxas, la geografía o las instituciones? Hoy toma posesión en España un nuevo ministro de justicia que resulta que está radicalmente enfrentado con el principal partido de la oposición (el Partido Popular) ¿Favorece o perjudica a la economía española qué el ministro de justicia esté enfrentado a la oposición paralamentaria? ¿Debería el ministro de justicia fortalecer las decisiones judiciales? ¿Crees que en España, a raíz de la OPA de Gas Natural sobre Endesa, han perdido credibilidad los organismos reguladores (tales como la CNE, Tribunal de la Competencia, CNMV,etc.? ¿Han quedado debilitadas estas instituciones?

    [post_title] => ¿Por qué hay países que son pobres y otros que son ricos? ¿Qué son las instituciones?
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => que_son_las_ins
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2007-02-12 10:02:36
    [post_modified_gmt] => 2007-02-12 09:02:36
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/02/que_son_las_ins.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 297
    [filter] => raw
)

¿Qué son las instituciones? ¿Qué papel juegan en el crecimiento económico? ¿De que depende el crecimiento económico de los países pobres? ¿Por qué ellos son pobres y nosotros ricos? Durante años, los economistas hicimos mucho hincapié en la importancia de contar con una buena política económica para alcanzar niveles altos de desarrollo económico (lucha contra la inflación, equilibrio presupuestario, grado de apertura comercial, sistema flexible del tipo de cambio, etc.). Sin embargo, recientemente los economistas nos hemos dado cuenta de que son las instituciones las que consiguen mejorar el crecimiento de la productividad y, por tanto, el desarrollo económico. De ahí que cada vez más, la ciencia económica esté incorporando a su acervo científico un mejor entendimiento del papel de las instituciones (como son los sistemas políticos libres y, por tanto, democráticos, los mercados de libre competencia, el buen funcionamiento del Estado de Derecho, los derechos de propiedad bien especificados y reforzados) como la clave del éxito económico y del buen funcionamiento de las economías. Ahora, en economía, lo ortodoxo es recalcar la importancia de que las instituciones sean propicias al crecimiento económico como, por ejemplo, la estabilidad política, la seguridad jurídica, la independencia del poder judicial y el buen funcionamiento de los sistemas legales, los patrones de ocupación de tierras, la independencia del banco central, la transparencia y baja corrupción de los gobiernos y las empresas (Siemens, por ejemplo, está siendo investigada por sobornos, una investigación internacional por supuesta corrupción en el conglomerado alemán), que los organismos reguladores sean creíbles e independientes, etc.

Seguir leyendo…

10
Feb
WP_Post Object
(
    [ID] => 4436
    [post_author] => 115
    [post_date] => 2007-02-10 18:16:45
    [post_date_gmt] => 2007-02-10 17:16:45
    [post_content] => La mayoría de los economistas, servicios de estudios y think tanks españoles piensan que las ayudas (fondos estructurales) recibidas por España de la Unión Europea (UE) han contribuido muy poco al mal llamado “milagro económico español”. Sin embargo la mayoría de los economistas no españoles piensan justamente lo contrario. Un ejemplo es el artículo que acaba de publicar hoy The Economist (Feb 10th-16th 2007)  titulado  “Buy, buy, buy" donde puedes encontrar un subapartado titulado "The gain in Spain”. Transcribo algunos párrafos textuales y me hago algunas preguntas.

"Spain seems to be unstoppable. Its main hunting ground has been Britain, where Spanish companies have spent more than $55 billion in recent years. The first deal was when a Spanish bank, Banco Santander, which at the time was little-known, swooped on Britain's sixth-largest bank, Abbey. The latest deal in the works is the €17.2 billion bid by Iberdrola, a Spanish electricity company, for Scottish Power, a utility that includes nuclear, hydro and wind power in its portfolio. The highest-profile Spanish deal of all, launched last year, was that of Ferrovial, a construction company, for BAA, the company that owned the three main airports serving London—Heathrow, Gatwick and Stansted—and six others.


So why is Spain emerging as such a successful predator? It has done well out of generous European Union aid since it joined the EU in 1986. Its economy has notched up an impressive average annual growth rate of 3.8% over the past ten years when the rest of continental Europe has lagged behind at around 2.1%. Membership of the euro has also facilitated cross-border deals. And the latest generation of Spanish business leaders has been educated in the ways of Anglo-Saxon capitalism at American universities rather than imbibing vintage mercantilism at some French grande école.

There are two further reasons behind Spain's foreign expansion. One is a special law that allows companies to offset against tax 30% of the goodwill costs of any foreign corporate purchase. Goodwill means the difference between the book value of assets and the actual price paid. This allows Spanish companies to outbid others. The second reason is that Spain's resurgence has been narrowly based on an inflationary boom in property, construction and banking. When that boom busts, the gain in Spain will turn mainly into pain. The intriguing question is whether the new conquistadores have borrowed and paid too much, or whether their new portfolio of (largely) British steady earners will save them from the worst when Spain itself turns sour".

¿Se torcerá la situación expansiva actual, tal como señala The Economist al final del artículo? ¿Cuándo? ¿En el 2008? ¿Que pasará con España cuando se pinche el boom inmobiliario y bancario que prevé The Economist? ¿Piensas que las ayudas que España ha recibido de la UE han contribuido sensiblemente al llamado “milagro español”?



    [post_title] => The Economist augura crisis económica en España
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => the_economist_a
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2007-02-10 18:16:45
    [post_modified_gmt] => 2007-02-10 17:16:45
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/02/the_economist_a.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 12
    [filter] => raw
)

La mayoría de los economistas, servicios de estudios y think tanks españoles piensan que las ayudas (fondos estructurales) recibidas por España de la Unión Europea (UE) han contribuido muy poco al mal llamado “milagro económico español”. Sin embargo la mayoría de los economistas no españoles piensan justamente lo contrario. Un ejemplo es el artículo que acaba de publicar hoy The Economist (Feb 10th-16th 2007) titulado “Buy, buy, buy» donde puedes encontrar un subapartado titulado «The gain in Spain”. Transcribo algunos párrafos textuales y me hago algunas preguntas.

«Spain seems to be unstoppable. Its main hunting ground has been Britain, where Spanish companies have spent more than $55 billion in recent years. The first deal was when a Spanish bank, Banco Santander, which at the time was little-known, swooped on Britain’s sixth-largest bank, Abbey. The latest deal in the works is the €17.2 billion bid by Iberdrola, a Spanish electricity company, for Scottish Power, a utility that includes nuclear, hydro and wind power in its portfolio. The highest-profile Spanish deal of all, launched last year, was that of Ferrovial, a construction company, for BAA, the company that owned the three main airports serving London—Heathrow, Gatwick and Stansted—and six others.

Seguir leyendo…

6
Feb

Turistas asiáticos

Escrito el 6 febrero 2007 por JUAN CARLOS MARTINEZ en Economía española

WP_Post Object
(
    [ID] => 4431
    [post_author] => 13668
    [post_date] => 2007-02-06 14:08:06
    [post_date_gmt] => 2007-02-06 13:08:06
    [post_content] => Ayer tuvo lugar en el Instituto un interesante desayuno-coloquio, organizado por Asia Empresarial, sobre las oportunidades que ofrece España como destino del turismo asiático. Hasta hace poco, los únicos asiáticos que de forma masiva hacían turismo eran los japoneses, pero en los últimos años, como consecuencia del crecimiento económico que experimenta la región, se empiezan a añadir los nacionales de otros países a este fenómeno.  Concretamente, se analizaron las características de tres mercados emisores: el ya mencionado Japón, China e India, es decir, la mayor economía de Asia y los dos colosos emergentes.

A pesar de ser radicalmente distintos, estos tres mercados presentan ciertas características comunes. Es un turismo con un poder adquisitivo elevado, que viaja mayoritariamente en grupos organizados, interesado en destinos  urbanos (difícilmente veremos a un asiático en la playa), con cierto interés cultural (los japoneses sí que destacan en esta parcela) y al que le gusta mucho “hacer compras”, a lo que dedica una parte sustancial del presupuesto de su viaje.

Pero mientras en Japón el turismo es una actividad extendida socialmente, en China e India, de momento sólo está al alcance de una clase emergente. Por otra parte, en China la salida de turistas está fuertemente regulada por las autoridades, lo que unido a los escasos periodos vacacionales de los que gozan los chinos, limita bastante sus posibilidades,  a pesar de lo que se viene hablando últimamente en ese sentido. Por último, está la cuestión del destino. La mayor parte del turismo que hacen los asiáticos  tiene como destino los países limítrofes y sólo una pequeña proporción elige Estados Unidos o Europa como destino.



En lo referido a nuestro país, lo primero que hay que indicar es que, aunque están aumentando las llegadas,  no somos uno de sus destinos favoritos, puesto que no existe una clara identificación de la marca España como destino turístico, salvo para los japoneses. Éstos  si que valoran la valoran (Barcelona y la arquitectura de Gaudí son dos poderosos reclamos), pero en cambio para los chinos, París es su icono y para los indios, Londres es su imán en Europa. De ahí que haya que aumentar los esfuerzos para mejorar el conocimiento de España en esos mercados. Otro problema al que nos enfrentamos es a la ausencia de vuelos directos entre España, Japón, India y China lo que limita notablemente la capacidad de llegada de turistas.

Pero lo último y más grave, es que a veces las restricciones las ponemos nosotros mismos. Aunque ahora lleva dos años recuperándose, tras las medidas adoptadas (en 2006 nos visitaron casi 270.000), aún no ha alcanzado los casi 400.000 turistas japoneses que llegaron en 1998. ¿Las razones del descenso? La inseguridad ciudadana. Durante años, los japoneses de visita en España eran el bocado favorito de los atracadores. ¿La consecuencia? El Ministerio de Asuntos Exteriores japonés incluyó a España como destino no recomendado por su peligrosidad.
Otro ejemplo. En China sólo hay dos consulados españoles: Pekín y Shanghai. Ambos están desbordados, pues deben tramitar las solicitudes de adopción   de niñas chinas por parejas españolas, las más numerosas tras las estadounidenses. Eso limita la posibilidad de emitir los correspondientes visados a los turistas chinos, redundando en un menor número de visitantes.

Queda por tanto una inmensa tarea por realizar para poder ser un referente del turismo asiático, al igual que se es del turismo europeo. No hay que  olvidar que el turista asiático es radicalmente distinto del europeo (mucho más centrado en el sol y playa), lo que implica una profunda adaptación de la industria y de la administración a esos nuevos y emergentes mercados.  Por cierto, para aquellos que os intereses el tema, en las Comunidades del Instituto existe un magnífico blog dedicado al sector turístico.


    [post_title] => Turistas asiáticos
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => turistas_asiati
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2023-12-13 13:55:07
    [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:55:07
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/02/turistas_asiati.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 2
    [filter] => raw
)

Ayer tuvo lugar en el Instituto un interesante desayuno-coloquio, organizado por Asia Empresarial, sobre las oportunidades que ofrece España como destino del turismo asiático. Hasta hace poco, los únicos asiáticos que de forma masiva hacían turismo eran los japoneses, pero en los últimos años, como consecuencia del crecimiento económico que experimenta la región, se empiezan a añadir los nacionales de otros países a este fenómeno. Concretamente, se analizaron las características de tres mercados emisores: el ya mencionado Japón, China e India, es decir, la mayor economía de Asia y los dos colosos emergentes.

A pesar de ser radicalmente distintos, estos tres mercados presentan ciertas características comunes. Es un turismo con un poder adquisitivo elevado, que viaja mayoritariamente en grupos organizados, interesado en destinos urbanos (difícilmente veremos a un asiático en la playa), con cierto interés cultural (los japoneses sí que destacan en esta parcela) y al que le gusta mucho “hacer compras”, a lo que dedica una parte sustancial del presupuesto de su viaje.

Pero mientras en Japón el turismo es una actividad extendida socialmente, en China e India, de momento sólo está al alcance de una clase emergente. Por otra parte, en China la salida de turistas está fuertemente regulada por las autoridades, lo que unido a los escasos periodos vacacionales de los que gozan los chinos, limita bastante sus posibilidades, a pesar de lo que se viene hablando últimamente en ese sentido. Por último, está la cuestión del destino. La mayor parte del turismo que hacen los asiáticos tiene como destino los países limítrofes y sólo una pequeña proporción elige Estados Unidos o Europa como destino.

Seguir leyendo…

2
Feb

España se convierte en la 8º economía mundial

Escrito el 2 febrero 2007 por JUAN CARLOS MARTINEZ en Economía española, Economía Mundial

WP_Post Object
(
    [ID] => 4427
    [post_author] => 13668
    [post_date] => 2007-02-02 19:50:17
    [post_date_gmt] => 2007-02-02 18:50:17
    [post_content] => Hace unos días, el Gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, anunciaba en una  conferencia pronunciada en Barcelona que el PIB español podía haberse situado por delante del canadiense, lo que convertiría a  España en la octava economía mundial, tras las de Estados Unidos, Japón, Alemania, China, Reino Unido, Francia e Italia.  La noticia no es nueva. La agencia de calificación Standard&Poors, certificaba en un reciente informe lo mismo, e incluso el Banco Mundial en sus estadísticas referidas al año 2005,  situaba el GNI español levemente por encima del de Canadá.

Según las estimaciones provisionales, el PIB español en 2006 fue de 972.200 millones de euros y, en  2007,  se espera que alcance 1.037.600 de euros. Con estos datos, se ha vuelto a abrir el debate sobre si España debería ocupar el puesto de Canadá en el G-8, el grupo que forman las 7 mayores economías del mundo, excepto China, y al que asiste Rusia por su importancia geopolítica y que supone el 45% del PIB mundial. La presencia en dicho club ya fue planteada a nivel informal por el anterior gobierno español, encontrando más receptividad en Estados Unidos que en Europa (el canciller alemán Schroeder ironizó sobre el hecho de que un país que recibía subsidios de sus socios comunitarios quisiera formar parte del club de las naciones más ricas del mundo),  aunque sin que llegara a concretarse nada. Recientemente, diversos sectores económicos y empresariales españoles han vuelto  a plantear la conveniencia de solicitar la incorporación, aunque la postura del actual gobierno pasa por no considerarlo un asunto prioritario, sino algo que sucederá más tarde o más temprano.



Lo que está claro es que España no podrá mantenerse como octava economía mundial durante mucho tiempo. Parece difícil que Canadá (que cuenta con algo más de 32 millones de habitantes, frente a los casi 45 que tiene España), recupere la posición que ocupaba, salvo que se produjera una fuerte debacle en nuestra economía. Pero en cambio India, cuyo PIB es aproximadamente dos tercios del español  y  que crece a tasas reales del 8%, no parece que vaya a tardar mucho tiempo en superar el tamaño de la economía española.  Hasta que eso ocurra, ¿sería bueno que España formase parte de un hipotético G-9?


    [post_title] => España se convierte en la 8º economía mundial
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => espana_se_convi_1
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2023-12-13 13:55:07
    [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:55:07
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/02/espana_se_convi_1.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 37
    [filter] => raw
)

Hace unos días, el Gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, anunciaba en una conferencia pronunciada en Barcelona que el PIB español podía haberse situado por delante del canadiense, lo que convertiría a España en la octava economía mundial, tras las de Estados Unidos, Japón, Alemania, China, Reino Unido, Francia e Italia. La noticia no es nueva. La agencia de calificación Standard&Poors, certificaba en un reciente informe lo mismo, e incluso el Banco Mundial en sus estadísticas referidas al año 2005, situaba el GNI español levemente por encima del de Canadá.

Según las estimaciones provisionales, el PIB español en 2006 fue de 972.200 millones de euros y, en 2007, se espera que alcance 1.037.600 de euros. Con estos datos, se ha vuelto a abrir el debate sobre si España debería ocupar el puesto de Canadá en el G-8, el grupo que forman las 7 mayores economías del mundo, excepto China, y al que asiste Rusia por su importancia geopolítica y que supone el 45% del PIB mundial. La presencia en dicho club ya fue planteada a nivel informal por el anterior gobierno español, encontrando más receptividad en Estados Unidos que en Europa (el canciller alemán Schroeder ironizó sobre el hecho de que un país que recibía subsidios de sus socios comunitarios quisiera formar parte del club de las naciones más ricas del mundo), aunque sin que llegara a concretarse nada. Recientemente, diversos sectores económicos y empresariales españoles han vuelto a plantear la conveniencia de solicitar la incorporación, aunque la postura del actual gobierno pasa por no considerarlo un asunto prioritario, sino algo que sucederá más tarde o más temprano.

Seguir leyendo…

1
Feb

Empobrecer al vecino

Escrito el 1 febrero 2007 por Javier Carrillo en Economía española, Política Monetaria, Unión Europea

WP_Post Object
(
    [ID] => 4426
    [post_author] => 28818
    [post_date] => 2007-02-01 12:37:10
    [post_date_gmt] => 2007-02-01 11:37:10
    [post_content] => Las políticas de “empobrecer al vecino” (beggar thy neighbour) pretenden la solución de los problemas económicos domésticos, habitualmente la falta de crecimiento y el desempleo, a través de medidas que pueden implicar un perjuicio a otros países, como el uso de devaluaciones competitivas o el establecimiento de barreras a la importación.

Éste es precisamente el título de un artículo publicado la semana pasada en The Economist, que a su vez hace referencia a un informe de la OCDE publicado en esos mismos días. El estudio, firmado por Olivier Blanchard, del MIT, señala a España como la siguiente víctima, tras la recuperación de Alemania, de lo que llama “las depresiones por turnos bajo el euro”. De acuerdo con esta visión, las características de nuestra área monetaria (lejos del óptimo señalado por Mundell: movilidad de los factores, flexibilidad en los precios y transferibilidad presupuestaria) predisponen a los Estados miembros a sufrir indefectiblemente una sucesión de expansiones y depresiones, cada vez en un país. Todo se inicia con una expansión de la demanda localizada en una economía, que lleva a incrementos salariales, pérdida de competitividad relativa frente al resto del área y, finalmente, a una contracción que no puede ser mitigada por la carencia de políticas monetarias nacionales y la imposibilidad del recurso a la devaluación. De acuerdo con Blanchard, la depresión “migra” a través de nuestra área monetaria respondiendo a los cambios en los costes laborales relativos entre países. Un crecimiento sostenido de los salarios de uno de los miembros por encima de la media, no compensado por incrementos equivalentes de productividad, sitúa al país como firme candidato en la ruleta del choque asimétrico.

El artículo advierte sobre la moderación salarial y las recientes ganancias en la productividad de la economía alemana, tras su salida del “purgatorio” de atonía y desempleo que por fin parece abandonar. Por oposición, The Economist llama la atención sobre el punto del ciclo en que se encuentran los costes laborales relativos de sus socios comerciales del Sur, y en particular de España. El comportamiento relativo de los tipos de cambio reales de ambos países con base en sus costes laborales unitarios habla por sí solo. La evolución de nuestra cuenta corriente apunta en la misma dirección. ¿Será España la siguiente economía en la ruleta?


    [post_title] => Empobrecer al vecino
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => empobrecer_al_v
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2023-12-13 13:42:36
    [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:42:36
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/02/empobrecer_al_v.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 0
    [filter] => raw
)

Las políticas de “empobrecer al vecino” (beggar thy neighbour) pretenden la solución de los problemas económicos domésticos, habitualmente la falta de crecimiento y el desempleo, a través de medidas que pueden implicar un perjuicio a otros países, como el uso de devaluaciones competitivas o el establecimiento de barreras a la importación.

Éste es precisamente el título de un artículo publicado la semana pasada en The Economist, que a su vez hace referencia a un informe de la OCDE publicado en esos mismos días. El estudio, firmado por Olivier Blanchard, del MIT, señala a España como la siguiente víctima, tras la recuperación de Alemania, de lo que llama “las depresiones por turnos bajo el euro”. De acuerdo con esta visión, las características de nuestra área monetaria (lejos del óptimo señalado por Mundell: movilidad de los factores, flexibilidad en los precios y transferibilidad presupuestaria) predisponen a los Estados miembros a sufrir indefectiblemente una sucesión de expansiones y depresiones, cada vez en un país. Todo se inicia con una expansión de la demanda localizada en una economía, que lleva a incrementos salariales, pérdida de competitividad relativa frente al resto del área y, finalmente, a una contracción que no puede ser mitigada por la carencia de políticas monetarias nacionales y la imposibilidad del recurso a la devaluación. De acuerdo con Blanchard, la depresión “migra” a través de nuestra área monetaria respondiendo a los cambios en los costes laborales relativos entre países. Un crecimiento sostenido de los salarios de uno de los miembros por encima de la media, no compensado por incrementos equivalentes de productividad, sitúa al país como firme candidato en la ruleta del choque asimétrico.

El artículo advierte sobre la moderación salarial y las recientes ganancias en la productividad de la economía alemana, tras su salida del “purgatorio” de atonía y desempleo que por fin parece abandonar. Por oposición, The Economist llama la atención sobre el punto del ciclo en que se encuentran los costes laborales relativos de sus socios comerciales del Sur, y en particular de España. El comportamiento relativo de los tipos de cambio reales de ambos países con base en sus costes laborales unitarios habla por sí solo. La evolución de nuestra cuenta corriente apunta en la misma dirección. ¿Será España la siguiente economía en la ruleta?

30
Ene

España se convierte en emisor neto de remesas

Escrito el 30 enero 2007 por JUAN CARLOS MARTINEZ en Economía española

WP_Post Object
(
    [ID] => 4423
    [post_author] => 13668
    [post_date] => 2007-01-30 10:22:57
    [post_date_gmt] => 2007-01-30 09:22:57
    [post_content] => El año 2006 ha sido el segundo consecutivo en el que las remesas que los inmigrantes asentados en España  envían al exterior, superan a las que llegan remitidas por los emigrantes españoles. El envío de remesas al exterior crece en la misma medida en que aumenta la población inmigrante en España, que según el INE alcanzó a finales de 2006 los 3.880.000 habitantes de habitantes, sobre un total de 44,7 millones, lo que supone el 8,7% de la población.  De esta manera, si en 2005 las remesas enviadas totalizaron algo más de 4.600 millones de euros,  en los diez primeros meses de 2006, ya han superado los 5.000 millones. Los principales destinos son Ecuador y  Colombia, seguidos de Marruecos y Rumanía. Por su parte, las cantidades que los emigrantes españoles remiten a nuestro país, se encuentran estabilizadas desde hace algún tiempo en algo más de 4.000 millones de euros anuales, aunque con una leve tendencia a la baja.

A pesar de que las cifras oficiales registran un continuo crecimiento de las cantidades remitidas al extranjero, el  BDE calcula que la parte registrada sólo representa entre el 50% y el 70% de las remesas, debido a las altas comisiones que conllevan los sistemas regulares de envío. De ahí el interés, por un lado de las autoridades económicas en normalizar dichos flujos reduciendo las comisiones que cobran las remesadoras  y por otro, de las entidades financieras españolas por captar parte de dicho mercado.

El que cada vez se envíen más fondos al exterior es una consecuencia lógica de los procesos migratorios. En 2005,  Latinoamérica recibió por este concepto más de 53.000 millones de dólares (una cantidad algo inferior a la flujos de inversión extranjera directa (IED) que arribaron a la región), ayudando a fortalecer el consumo y a paliar el déficit de ahorro interno.  Pero a diferencia de la IED, las remesas no están sujetas a los vaivenes económicos y políticos, por lo que constituyen una fuente mucho más estable de financiación.





Por último, resulta sorprendente constatar que España aún mantiene más de un millón de emigrantes en el extranjero (Argentina, Francia, Venezuela, Alemania y Suiza son por este orden los países donde residen en mayor número), y que éstos remiten más de 4.000 millones de euros al año. El acelerado proceso inmigratorio en el que estamos sumidos desde hace una década, nos ha hecho olvidar que España fue hasta hace muy poco un país en el mucha gente tuvo que emigrar para buscarse un futuro mejor o para poder sustentar a su familia. Sin el concurso de las remesas que ellos enviaron a sus allegados,  hubiera resultado imposible, por ejemplo, que el milagro español de la década de los sesenta del pasado siglo (en la que España se transformó en un país industrial), hubiera tenido lugar. Hoy nos toca vivir el proceso inverso, lo que no es sino el más fiel indicador, de lo que ha cambiado España en los últimos cuarenta años.


    [post_title] => España se convierte en emisor neto de remesas
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => espana_se_convi
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2023-12-13 13:55:08
    [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:55:08
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/01/espana_se_convi.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 0
    [filter] => raw
)

El año 2006 ha sido el segundo consecutivo en el que las remesas que los inmigrantes asentados en España envían al exterior, superan a las que llegan remitidas por los emigrantes españoles. El envío de remesas al exterior crece en la misma medida en que aumenta la población inmigrante en España, que según el INE alcanzó a finales de 2006 los 3.880.000 habitantes de habitantes, sobre un total de 44,7 millones, lo que supone el 8,7% de la población. De esta manera, si en 2005 las remesas enviadas totalizaron algo más de 4.600 millones de euros, en los diez primeros meses de 2006, ya han superado los 5.000 millones. Los principales destinos son Ecuador y Colombia, seguidos de Marruecos y Rumanía. Por su parte, las cantidades que los emigrantes españoles remiten a nuestro país, se encuentran estabilizadas desde hace algún tiempo en algo más de 4.000 millones de euros anuales, aunque con una leve tendencia a la baja.

A pesar de que las cifras oficiales registran un continuo crecimiento de las cantidades remitidas al extranjero, el BDE calcula que la parte registrada sólo representa entre el 50% y el 70% de las remesas, debido a las altas comisiones que conllevan los sistemas regulares de envío. De ahí el interés, por un lado de las autoridades económicas en normalizar dichos flujos reduciendo las comisiones que cobran las remesadoras y por otro, de las entidades financieras españolas por captar parte de dicho mercado.

El que cada vez se envíen más fondos al exterior es una consecuencia lógica de los procesos migratorios. En 2005, Latinoamérica recibió por este concepto más de 53.000 millones de dólares (una cantidad algo inferior a la flujos de inversión extranjera directa (IED) que arribaron a la región), ayudando a fortalecer el consumo y a paliar el déficit de ahorro interno. Pero a diferencia de la IED, las remesas no están sujetas a los vaivenes económicos y políticos, por lo que constituyen una fuente mucho más estable de financiación.

Seguir leyendo…

27
Ene

¿Es suficiente con crear empleo?

Escrito el 27 enero 2007 por en Economía española

WP_Post Object
(
    [ID] => 4419
    [post_author] => 115
    [post_date] => 2007-01-27 00:13:07
    [post_date_gmt] => 2007-01-26 23:13:07
    [post_content] => Como complemento, al artículo que publico hoy sábado en el diario EXPANSIÓN "¿Es suficiente con crear empleo?", me gustaría añadir que según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) hecha pública ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el empleo en España ha crecido en el conjunto del año 2006 sobre todo en los servicios (540.900 nuevo puestos de trabajo), después fue la construcción (con 200.300 empleos nuevos) y, por último la  industria con solo 31.300 nuevos puestos de trabajo. Por tanto, los sectores más creadores de empleo vuelven a ser los de más baja productividad: la construcción y los servicios. Es de lamentar que el empleo en el sector industrial siga avanzando a tasas muy modestas. Por tanto, un aspecto negativo del patrón de creación de empleo de la economía española es su concentración en actividades de baja calificación y escaso valor añadido. Este argumento se refuerza por el hecho de que el incremento habido en la ocupación en 2006 ha sido sobretodo de mano de obra inmigrante con un crecimiento del 21,15%, con respecto al año 2005, mientras que el empleo de trabajadores españoles solo creció un 1,62%. Desgraciadamente, España se sitúa a la cola de la Unión Europea en innovación empresarial. El camino que hemos elegido es el de la construcción y los servicios que, según la EPA, son los sectores que crean más empleo. Y no se debe olvidar que el empleo está siendo el motor de nuestra economía. Efectivamente, el fuerte incremento del empleo (sobre todo inmigrante), genera más masa salarial y, por tanto, mayor demanda de consumo y de viviendas, lo que significa más producción de bienes de consumo y más construcción, es decir, más crecimiento económico y empleo, lo que a su vez aumenta la renta, etc. Este círculo virtuoso se basa, en buena medida, en el crecimiento del empleo en sectores de baja productividad (construcción y servicios) ¿En situación tan favorable como la actual podría terminar este “boom” de crecimiento y empleo? ¿Qué puede pasar si siguen subiendo los tipos de interés o se frena el empleo porque se produce una brusca desaceleración del mercado inmobiliario o todo a la vez? ¿Se rompería el círculo virtuoso del empleo y comenzaría un círculo vicioso, es decir habría menos consumo, menos crecimiento y menos empleo? ¿Dan los políticos suficiente importancia a los fuertes desequilibrios (inflación y déficit exterior) que este fuerte crecimiento está generando?



    [post_title] => ¿Es suficiente con crear empleo?
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => es_suficiente_c
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2007-01-27 00:13:07
    [post_modified_gmt] => 2007-01-26 23:13:07
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/01/es_suficiente_c.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 3
    [filter] => raw
)

Como complemento, al artículo que publico hoy sábado en el diario EXPANSIÓN «¿Es suficiente con crear empleo?», me gustaría añadir que según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) hecha pública ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el empleo en España ha crecido en el conjunto del año 2006 sobre todo en los servicios (540.900 nuevo puestos de trabajo), después fue la construcción (con 200.300 empleos nuevos) y, por último la industria con solo 31.300 nuevos puestos de trabajo. Por tanto, los sectores más creadores de empleo vuelven a ser los de más baja productividad: la construcción y los servicios. Es de lamentar que el empleo en el sector industrial siga avanzando a tasas muy modestas. Por tanto, un aspecto negativo del patrón de creación de empleo de la economía española es su concentración en actividades de baja calificación y escaso valor añadido. Este argumento se refuerza por el hecho de que el incremento habido en la ocupación en 2006 ha sido sobretodo de mano de obra inmigrante con un crecimiento del 21,15%, con respecto al año 2005, mientras que el empleo de trabajadores españoles solo creció un 1,62%. Desgraciadamente, España se sitúa a la cola de la Unión Europea en innovación empresarial. El camino que hemos elegido es el de la construcción y los servicios que, según la EPA, son los sectores que crean más empleo. Y no se debe olvidar que el empleo está siendo el motor de nuestra economía. Efectivamente, el fuerte incremento del empleo (sobre todo inmigrante), genera más masa salarial y, por tanto, mayor demanda de consumo y de viviendas, lo que significa más producción de bienes de consumo y más construcción, es decir, más crecimiento económico y empleo, lo que a su vez aumenta la renta, etc. Este círculo virtuoso se basa, en buena medida, en el crecimiento del empleo en sectores de baja productividad (construcción y servicios) ¿En situación tan favorable como la actual podría terminar este “boom” de crecimiento y empleo? ¿Qué puede pasar si siguen subiendo los tipos de interés o se frena el empleo porque se produce una brusca desaceleración del mercado inmobiliario o todo a la vez? ¿Se rompería el círculo virtuoso del empleo y comenzaría un círculo vicioso, es decir habría menos consumo, menos crecimiento y menos empleo? ¿Dan los políticos suficiente importancia a los fuertes desequilibrios (inflación y déficit exterior) que este fuerte crecimiento está generando?

23
Ene
WP_Post Object
(
    [ID] => 4415
    [post_author] => 115
    [post_date] => 2007-01-23 16:19:59
    [post_date_gmt] => 2007-01-23 15:19:59
    [post_content] => Según la OCDE “Youth education attainment level” el promedio de la población joven, con edades comprendidas entre los 20 y 24 años, que tienen como mínimo una educación secundaria superior, se sitúa en la UE-25 en un 77%. Entre los países mejor formados destacan Eslovaquia con un 91,5%, Eslovenia con un 90,6%, la República Checa con un 90,3% y Polonia con un 90,0%, cuatro naciones que gracias a la buena capacitación de sus trabajadores están resultando muy atractivas para el establecimiento de nuevas plantas de producción. Entre los países de la antigua UE-15 cabe resaltar a Suecia con un 87,8% y también a Irlanda con un 86,1% y un enorme éxito económico a sus espaldas. Austria, Lituania y Finlandia se sitúan en torno al 85%, mientras que Grecia registra un 84% y Hungría y Francia cuentan con cifras cercanas al 83%. España es –junto con Malta y Portugal- el país con el menor nivel de formación entre la población joven. Sólo un 61,3% de las personas con edades entre 20 y 24 años tienen una formación equivalente a la enseñanza secundaria superior. Como agravante cabe señalar, además, que la cifra lejos de mejorar ha ido empeorando desde el año 2000. En la actualidad, la economía precisa de cada vez más conocimientos para lograr aumnetos de productividad que permitan un desarrollo dinámico y competitivo. El nivel educativo de las personas se ha convertido en un aspecto cada vez más importante. La mayoría de los países de la UE cuentan con una buena formación entre los jóvenes, pero no es el caso de España que sigue suspendiendo año tras año en esta asignatura. España debe mejorar su nivel educativo adecuándolo a las necesidades de un cambiante sistema productivo. Una sociedad mejor educada redundará en mejoras de productividad que favorecerá tanto al individuo como a la economía en su conjunto. No nos puede extrañar que, tal como señala hoy el diario Expansión, España sea el único país de la UE que pierde productividad (-0,5% medio anual). Mientras el crecimiento de la productividad en Alemania (2%) está por encima de la media de la UE (1,5%) ¿Nos acercamos a Alemania, tal como dijo el Presidente Zapatero?

    [post_title] => España: bajo nivel de formación y caída en al productividad.
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => espana_bajo_niv
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2007-01-23 16:19:59
    [post_modified_gmt] => 2007-01-23 15:19:59
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/01/espana_bajo_niv.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 4
    [filter] => raw
)

Según la OCDE “Youth education attainment level” el promedio de la población joven, con edades comprendidas entre los 20 y 24 años, que tienen como mínimo una educación secundaria superior, se sitúa en la UE-25 en un 77%. Entre los países mejor formados destacan Eslovaquia con un 91,5%, Eslovenia con un 90,6%, la República Checa con un 90,3% y Polonia con un 90,0%, cuatro naciones que gracias a la buena capacitación de sus trabajadores están resultando muy atractivas para el establecimiento de nuevas plantas de producción. Entre los países de la antigua UE-15 cabe resaltar a Suecia con un 87,8% y también a Irlanda con un 86,1% y un enorme éxito económico a sus espaldas. Austria, Lituania y Finlandia se sitúan en torno al 85%, mientras que Grecia registra un 84% y Hungría y Francia cuentan con cifras cercanas al 83%. España es –junto con Malta y Portugal- el país con el menor nivel de formación entre la población joven. Sólo un 61,3% de las personas con edades entre 20 y 24 años tienen una formación equivalente a la enseñanza secundaria superior. Como agravante cabe señalar, además, que la cifra lejos de mejorar ha ido empeorando desde el año 2000. En la actualidad, la economía precisa de cada vez más conocimientos para lograr aumnetos de productividad que permitan un desarrollo dinámico y competitivo. El nivel educativo de las personas se ha convertido en un aspecto cada vez más importante. La mayoría de los países de la UE cuentan con una buena formación entre los jóvenes, pero no es el caso de España que sigue suspendiendo año tras año en esta asignatura. España debe mejorar su nivel educativo adecuándolo a las necesidades de un cambiante sistema productivo. Una sociedad mejor educada redundará en mejoras de productividad que favorecerá tanto al individuo como a la economía en su conjunto. No nos puede extrañar que, tal como señala hoy el diario Expansión, España sea el único país de la UE que pierde productividad (-0,5% medio anual). Mientras el crecimiento de la productividad en Alemania (2%) está por encima de la media de la UE (1,5%) ¿Nos acercamos a Alemania, tal como dijo el Presidente Zapatero?

22
Ene
WP_Post Object
(
    [ID] => 4414
    [post_author] => 115
    [post_date] => 2007-01-22 10:57:06
    [post_date_gmt] => 2007-01-22 09:57:06
    [post_content] => Como complemento al artículo aparecido hoy en el diario El Mundo (página 33) quisiera añadir que según datos de Eurostat las exportaciones de bienes de alta tecnología -relacionados con la aeronáutica, la informática, la electrónica y las telecomunicaciones, la maquinaria eléctrica, los instrumentos científicos, los productos farmacéuticos y químicos- suponen un 29% en los Estados Unidos, un 22% en Japón, en Francia un 20% y Alemania un 15%. España figura entre los países con escaso componente exportador de alta tecnología. Sólo un 6% del total de nuestras ventas al exterior son productos con tecnología punta, por lo que somos el país más rezagado entre los de la UE-15. ¿Nos acercamos a Alemania? ¿Converegemos con Alemania? Parece que no Alemenia es el país con mayores exportaciones del mundo (9,1% del total mundial). España solo exporta el 1,8% de las exportaciones mundiales mundo. Pero es quer además, como se señala más arriba nuestra proporción en productos de alta tecnología es muy baja (6%) y las de Alemania representan el 15%. ESPAÑA EXPORTA POCOS PRODUCTOS DE ALTA TECNOLOGÍA ¿Significa algo?

    [post_title] => ¿Converge España con Alemania?
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => converge_espana
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2007-01-22 10:57:06
    [post_modified_gmt] => 2007-01-22 09:57:06
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/01/converge_espana.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 4
    [filter] => raw
)

Como complemento al artículo aparecido hoy en el diario El Mundo (página 33) quisiera añadir que según datos de Eurostat las exportaciones de bienes de alta tecnología -relacionados con la aeronáutica, la informática, la electrónica y las telecomunicaciones, la maquinaria eléctrica, los instrumentos científicos, los productos farmacéuticos y químicos- suponen un 29% en los Estados Unidos, un 22% en Japón, en Francia un 20% y Alemania un 15%. España figura entre los países con escaso componente exportador de alta tecnología. Sólo un 6% del total de nuestras ventas al exterior son productos con tecnología punta, por lo que somos el país más rezagado entre los de la UE-15. ¿Nos acercamos a Alemania? ¿Converegemos con Alemania? Parece que no Alemenia es el país con mayores exportaciones del mundo (9,1% del total mundial). España solo exporta el 1,8% de las exportaciones mundiales mundo. Pero es quer además, como se señala más arriba nuestra proporción en productos de alta tecnología es muy baja (6%) y las de Alemania representan el 15%. ESPAÑA EXPORTA POCOS PRODUCTOS DE ALTA TECNOLOGÍA ¿Significa algo?

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle contenido relacionado con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información aquí. Aceptar