Archivo de noviembre/2006

17
Nov

El petróleo de Guinea Ecuatorial

Escrito el 17 noviembre 2006 por JUAN CARLOS MARTINEZ en África, Energía, medio ambiente y cambio climático

Esta semana está de visita en Madrid, Teodoro Obiang Nguema, el Presidente de Guinea Ecuatorial. Guinea Ecuatorial es un pequeño país subsahariano, situado en costa occidental de África y formado por un territorio continental y una isla, actualmente llamada Bioko, pero que antes se llamaba Fernando Poo. Fue colonia española hasta 1968 y es la única nación del África subsahariana que tiene el castellano como lengua oficial. Su visita ha causado mucha polémica en España, pues el régimen ecuatoguineano, que preside Obiang desde que en 1979 dio un golpe de estado, es de todo menos democrático. El autoritarismo, la corrupción, el acoso a la oposición y las violaciones de los derechos humanos, han sido las señas de identidad del gobierno Obiang, lo que provocó un enfriamiento de las relaciones con España, y situaron al régimen contra las cuerdas a principios de los noventa. El FMI y el Banco Mundial abandonaron al país, y España no renovó su cooperación. Incluso en 1995, Estados Unidos cerró su embajada en Guinea Ecuatorial.

Pero hacia 1996, todo cambió. Compañías norteamericanas descubrieron petróleo en la costa guineana, y el país empezó a verse inundado de dinero. Bueno, más que el país, la familia Obiang y sus allegados. Una investigación de un comité del Senado de Estados Unidos, encontró varios cientos de millones de dólares a nombre de Obiang y de sus familiares en el Banco Riggs de Washington, el mismo donde también aparecieron las cuentas secretas de Pinochet. Con una producción de 355.000 millones de barriles diarios en 2005 (la mayor parte exportado a Estados Unidos y China), Guinea se ha convertido en el séptimo productor de petróleo de África, tras Nigeria, Argelia, Libia, Angola, Egipto y Sudán. El PIB se ha duplicado entre 1998 y 2004, y la renta per cápita se ha convertido en la segunda más alta del planeta, tras la de Luxemburgo, puesto que cuenta con poco más de medio millón de habitantes https://www.cia.gov/cia/publications/factbook/geos/ek.html Pero la inmensa mayoría de la población sigue sumida en la pobreza, y el país sigue ocupando uno de los últimos puestos en el Índice de Desarrollo Humano que elabora la ONU.

En 2003, Estados Unidos acordó reabrir su embajada, al parecer a petición de las compañías petrolíferas estadounidenses con intereses en Guinea Ecuatorial. Ahora, el gobierno español ha decidido reactivar las relaciones políticas y comerciales con Guinea, con el objetivo de que Repsol y otras empresas se puedan beneficiar del maná petrolero, y en ese contexto se enmarca su visita de Obiang a Madrid. Me pregunto si la actitud del gobierno español es lícita, si hace bien paseando a Obiang por Madrid (entrevista con el Presidente Zapatero y con el líder de la oposición, cena con los Reyes, reuniones con empresarios…), a cambio de lograr contratos sus empresas. Claro que si se continúa manteniendo el boicot al régimen guineano, serán compañías de otros países las que se lleven el pastel. Y si lo pensamos bien, todo el mundo considera que China es un excelente aliado comercial, y también es un país donde no existe libertad, no se respetan los derechos humanos… ¿Qué pensáis al respecto?

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16
Nov

Ha muerto Milton Friedman

Escrito el 16 noviembre 2006 por en Economía Mundial

Ha muerto Milton Friedman, premio Nóbel de Economía y quizá el economista más influyente del siglo XX después de John Maynard Keynes. Su doctrina tiene que ver con la defensa de la libertad de mercado tanto a nivel nacional como a nivel internacional. De su defensa del mercado se derivan modelos económicos como el de Chile o China, el avance de la globalización, la extensión del capitalismo tras la caída de la URSS, el éxito de la economía norteamericana, y la reciente pujanza de India.

Su principal tesis sostiene que hay una relación estrecha entre la inflación y la oferta monetaria, de modo que los precios pueden ser controlados regulando, por parte del banco central, el dinero que entra en el sistema. “La inflación es siempre y en todas partes un fenómeno monetario en el sentido de que es y sólo puede ser producido por un aumento más rápido en la cantidad de dinero que de la producción. De modo que, para evitar la inflación, debe buscarse un equilibrio entre la producción y la cantidad de dinero”, reza uno de sus pasajes más conocidos. De ahí que entre los friedmanianos más ferveintes se encuentren practicamente todos los abnqueros centrales del mundo.

Margaret Thatcher, en Reino Unido y Ronald Reagan, en Estados Unidos, siguieron su ideario cuando estuvieron, en la décda de los años ochenta, al frente del Gobierno de sus países. Gracias a sus ideas, consiguieron adelgazar el peso del Estado en la economía, desregular los mercados y debilitar a los sindicatos. Friedman era partidario de que “el espacio de acción del Estado debería limitarse. Su principal tarea debería ser proteger nuestra libertad, asegurar el orden y los contratos privados, y promover mercados competitivos”.

Friedman era partidario de un sistema de tipos de cambio flotante puro. Que es el régimen que actualmente tienen el dólar, el euro y el yen. El afirmaba rotundamente que nunca hubo, ni puede haber, una crisis cambiaria bajo el régimen de tipo de cambio flotante puro. Puede haber crisis internas en los países pero no irán acompañadas de crisis cambiarias. La razón es simple: las fluctuaciones de los tipos de cambio en un sistema de tipos de cambio limpio absorben o ajustan automáticamente las presiones mientras que en un régimen de tipos de cambio fijo o un sistema de tipos de cambio flotantes sucio llevan a la crisis. En este sentido creía que el FMI era un factor desestabilizador cuando protege a los países para que mantengan un los sistemas de tipo cambio fijo. “No es una exageración decir que, si no hubiera habido un FMI, no hubiera habido una crisis asiática, aunque los países individuales pudieran tener crisis internas”. El legado de Milton Friedman puede reducirse en una frase: amor a la libertad y horror por el Estado. Su doctrina económica está basada en el liberalismo que le llevó a reclamar planes de pensiones privados y tipos únicos de IRPF. Ha muerto uno de los economista más importantes del siglo XX.

15
Nov

Un déficit exterior de escándalo

Escrito el 15 noviembre 2006 por en Economía española

Hoy publica el Banco de España que en 2006 el déficit acumulado de la balanza por cuenta corriente (enero agosto) ascendió a 58.000 millones de euros, frente a los 44.335 millones de déficit por cuenta corriente de los 8 primeros meses del año 2005. Esta fuerte ampliación del déficit corriente se debió, principalmente, al aumento del déficit comercial. Así el déficit acumulado de la balanza comercial se elevó en el conjunto de los ocho primeros meses del año hasta 52.490 millones de euros. Como el PIB que estimo para los primeros ocho meses del año es de 648 mil millones de euros, nuestro desequilibrio externo se ha convertido en el más alto del mundo desarrollado en términos relativos (9% del PIB) y el segundo más alto del mundo, después de EEUU, en términos absolutos. Son niveles que indican claramente que España pierde competitividad. Esta pérdida se manifiesta también en la disminución de cuota de mercado de nuestras exportaciones sobre el total mundial y comunitario. La otra cara del déficit por cuenta corriente es el superávit de la cuenta financiera que no es otra cosa que el aumento de la posición deudora de España con respecto al resto del mundo. El saldo negativo por cuenta corriente indica que hay mayor inversión nacional que ahorro nacional. O lo que es lo mismo el superávit de la cuenta financiera nos indica que estamos invirtiendo, (comprando inmuebles por ejemplo) más de lo que ahorramos. Esa necesidad de financiación de la economía española refleja un importante proceso inversor en los últimos años, para el que ha sido insuficiente nuestro ahorro interno. Es cierto que buena parte de la inversión se ha centrado en construcción y no en bienes de equipo, es decir, no en la parte más eficiente de inversión. Pero nuestro modelo de crecimiento tiene unas características que son difíciles de cambiar en el corto plazo.

Sin embargo, como recientemente señalaba La Caixa, cualquier deuda conlleva una obligación de devolución futura, lo cual significa que en algún momento necesitaremos generar superávit por cuenta corriente para poder saldar la deuda. Parece, sin embargo, que esto no va a ser posible ya que la mayor disponibilidad de capital de que disfrutamos se está destinando a financiar el crédito al consumo y a la vivienda, en vez de dirigirlo a mejorar nuestra productividad y, por tanto, nuestra competitividad. Si esto es así, poco estamos haciendo para poder devolver la deuda, lo que debilita nuestra solvencia. En este contexto pudiera ocurrir que el inversor extranjero, percibiendo esta menor solvencia, decidiera disminuir sus activos en España y exigir, además, por ellos una mayor rentabilidad. O lo que es lo mismo nuestra disponibilidad de crédito externo se reduciría y se encarecería. Esta disminución de la oferta de crédito implicaría una menor inversión y consumo internos. En definitiva, el menor crédito externo se traduciría en un brusco enfriamiento de la demanda de consumo y de inversión por lo que el aparato productivo tendría que ajustarse a la menor demanda con reducciones en la producción y aumentos importantes en el desempleo. ¿Sufrirá España una recesión económica, en toda regla, con daños incalculables si siguen los desequilibrios? ¿Tendremos que hacer las reformas estructurales en frío (a la japonesa) para ganar competitividad y poder así salir del “hoyo”? ¿Formar parte del euro hace que nuestro déficit de la balanza por cuenta corriente sea menos grave?

14
Nov

La atractiva economía india

Escrito el 14 noviembre 2006 por JUAN CARLOS MARTINEZ en China, Economía Mundial

Esta mañana ha dado una conferencia en el Instituto, el Secretario de Estado de Asuntos Exteriores de India, Mr. Anand Sharma. En ella ha desgranado los atractivos y las oportunidades que ofrece su país como destino de inversiones. En este caso de inversiones españolas, por cierto, muy escasas hasta la fecha.

En los últimos tiempos, India se está configurando como el otro gran gigante emergente del continente asiático y de la economía mundial. La mayor democracia del planeta, con unos 1.100 millones de personas, superará en población a China dentro de 25 ó 30 años. Su crecimiento económico se ha acelerado desde 2003, y actualmente supera el 8%, gracias a la demanda interna, a las exportaciones, y a la entrada de capitales extranjeros. Aunque lo que distingue a India, es que su patrón de crecimiento está basado fundamentalmente en desarrollo de los servicios, frente al modelo industrial de los tigres y dragones del sudeste asiático. Gracias al alto grado de cualificación y al dominio del inglés que tiene una parte significativa de su población, el país se está convirtiendo en un centro de desarrollo de servicios y de tecnologías de la información. Actualmente es la décima potencia económica mundial, y su economía es aproximadamente un tercio de la china, pero las previsiones indican que India podría convertirse en la tercera economía del planeta hacia el año 2035.

A pesar de sus altas tasas de crecimiento, la economía no presenta grandes desajustes macroeconómicos, salvo en el ámbito fiscal: la inflación viene rondando el 5% y el déficit por cuenta corriente, aunque aumentando, no alcanza el 3% de su PIB. Pero su talón de Aquiles, (obviando por supuesto los dramáticos niveles de pobreza y de desigualdades sociales), son sus infraestructuras. Si India quiere mantener sus ritmos de crecimientos necesitará fortísimas inversiones para mejorarlas. Y debido a que el déficit público, supera el 7% del PIB, y a que la deuda pública acumulada, ronda el 80% del PIB, resulta difícil pensar que el país podrá acometer en solitario las inversiones necesarias, lo que abre una ventana de oportunidades a las grandes constructoras españolas.

La cuestión a dilucidar es si en India, al igual que en China, se darán las condiciones necesarias para poder seguir creciendo a tasas superiores al 8% durante mucho tiempo.

13
Nov

España se desindustrializa

Escrito el 13 noviembre 2006 por en Economía española

Desde nuestra entrada en la UE, en 1986, las estructuras sectoriales de nuestro empleo y de nuestro producto interno bruto (PIB) han cambiado sustancialmente. En los últimos veinte años (1985-2005), el empleo en los servicios ha aumentado 15 puntos porcentuales en el total de la ocupación y la construcción lo ha hecho en 5 puntos. El empleo agrícola, tiene una caída espectacular, pasó del 18% al 5%. El industrial también cayó del 25% al 17%. La misma tónica marca las proporciones de los diferentes sectores económicos en el PIB: Así el peso de los servicios en el PIB ha aumentado (desde el 59’5 por 100 al 67’5). La construcción aumenta su participación en el PIB
¡un 81%¡ En cambio el peso de la industria ha disminuido del 28 al 18% por 100 del total (una barbaridad) y el de la agricultura también ha caído del 6 al 3 por 100.










ESPAÑA: ESTRUCTURA DEL EMPLEO Y DEL PIB EN PORCENTAJE
Año 1985Año 2005Variación de la particip.
EmpleoPIBEmpleoPIBEmpleoPIB
Agricultura17,76,05,33,3-70%-45%
Industria24,628,017,317,7-30%-37%
Construcción7,56,412,411,665%81%
Servicios50,259,665,067,530%13%
Total100100100100


Para muchas personas esta evolución desde la agricultura y la industria hacia los servicios y la construcción es una evolución histórica natural y además de ser un factor de progreso ya que está relacionado con el aumento del bienestar. Sin embargo muchos servicios dependen de la industria. Los servicios financieros y de seguros, los comerciales, los de transporte, los de consultoría, auditoría, ingeniería, diseño, investigación, etc. dependen de la industria y en menor medida, de la agricultura y la construcción. Este tipo de servicios no existiría ni se desarrollaría en ningún país, si no existiese una base industrial fuerte.


La experiencia histórica de las economías más avanzadas y también de las economías asiáticas muestra que para alcanzar un nivel alto de desarrollo es preciso establecer una base industrial interna amplia y robusta. Es más: no se conoce ningún país desarrollado, de tamaño grande, que no sea industrializado, así el G-7, es el grupo de países más importantes y más industrializados del Mundo. La industria se percibe como una señal de desarrollo, empleo, productividad y fortaleza. De ahí que el fuerte proceso desindustrializador que actualmente atraviesa España haya encendido la luz de alarma. En este sentido a primera pregunta que hay que hacerse es: ¿Puede sobrevivir una economía basada solamente en los servicios? ¿Cómo compensa España la fuerte importación, que está realizando, de bienes agrícolas e industriales que no produce? ¿Es esta la razón por la que tenemos un déficit exterior brutal? ¿El bajo crecimiento de la productividad en España se debe a la desindustrialización? ¿Debemos aprender de Irlanda?

10
Nov

La economía irlandesa sigue yendo como una moto. En 2000-2005, el crecimiento medio del PIB de Irlanda fue de 6.1%. 2005 fue otro año con un crecimiento importante del PIB de 4.7%. Se estima que la economía irlandesa puede crecer alrededor de un 5% hasta el final de esta década. ¿A que se debe el éxito de Irlanda? A factores internos y externos: a) A los pactos sociales que implican la cooperación estrecha entre el gobierno, los sindicatos y empresarios. Este ha sido un factor muy importante para crear un ambiente competitivo que conduce hacia el desarrollo económico. Se ha ratificado un nuevo pacto con duración de 10 años (hasta el 2016) b) Las políticas del gobierno en Inversión Directa Exterior (IDE) han sido constantes, proactivas y estables. Las políticas específicas del gobierno que contribuyeron significativamente al éxito ha sido un tipo bajo en el impuesto de sociedades (12,5%) para animar a la IDE y centrarla en áreas clave tales como servicios financieros, biotecnología y sectores farmacéuticos y el desarrollo de un programa importante para la inversión en infraestructura c) Las condiciones externas, tales como ser miembro de la UE y acceso al mercado interior, y la proximidad unido al impresionante crecimiento de la economía de los EEUU son factores claves para atraer la IDE a Irlanda d) La disponibilidad de mano de obra calificada ha sido vital en la atracción de la inversión externa. Irlanda tiene un elevado nivel educativo y la mano de obra es flexible, receptiva y creativa e) En los últimos diez años el número de estudiantes a tiempo completo en el tercer nivel educativo ha aumentado casi un 80%, mientras que el número de estudiantes a tiempo completo en los politécnicos aumentó mas del doble. La proporción de personas de 25-34 años que han logrado la educación terciaria está en el 37% comparado con el promedio de la UE del 27%. En 2004, el 57% de los graduados del tercer nivel de educación estaban cualificados en ingeniería, ciencias computacionales, estudios de negocios y ciencias.

Se podría decir que el éxito de Irlanda se ha basado en la aplicación acertada de lo que los economistas llamamos políticas de oferta (las que mejoran y aumentan el tejido productivo), a su proximidad a EEUU, el idioma y los campos de golf (sin los cuales como es sabido no acude la IDE. ¿Podemos aprender, España, México, Italia, etc. algo del caso de Irlanda? ¿Se trata de una economía pequeña (como de juguete) y por tanto es fácil de gestionar? ¿Que perspectivas de futuro tiene Irlanda?

9
Nov

La Comisión Europea advierte a Turquía

Escrito el 9 noviembre 2006 por JUAN CARLOS MARTINEZ en Unión Europea

La Comisión Europea dio un ayer a Turquía un margen hasta diciembre para que comience a dar una solución al contencioso que mantiene con Chipre, si no quiere ver paralizadas las negociaciones de adhesión a la Unión Europea. Turquía sigue sin reconocer al Gobierno grecochipriota de Nicosia, que desde mayo de 2004 forma parte de la Unión Europea, mientras que apoya a la República Turca del Norte de Chipre, un territorio ocupado militarmente por Ankara desde 1974. La cuestión no es fácil para Turquía. La mayoría de sus ciudadanos se niega a hacer concesiones en el tema chipriota, y cree que Bruselas plantea exigencias para la adhesión cada vez más inaceptables. Y teniendo en cuenta que en 2007 habrá elecciones, resulta difícil imaginar que el Gobierno turco tenga margen para encontrar una solución.

La semana pasada tuve la ocasión de asistir a la Conferencia sobre riesgo-país que anualmente organiza CESCE. Este año, los temas tratados fueron Latinoamérica y Turquía. Por fin, Turquía, un inmenso mercado de más de 70 millones de habitantes que probablemente en un futuro no muy lejano formará parte de la Unión, empieza a despertar interés en España. En la Conferencia (muy buena por cierto), los oradores turcos defendieron la adhesión de su país por cuestiones históricas y de oportunidad económica y política, y resaltaron los importantes esfuerzos que el Gobierno islamista moderado de Tayyib Erdogan está haciendo para asumir el acervo comunitario.

Pero a Turquía no le faltan detractores entre los gobiernos comunitarios (Francia, Alemania o Austria se muestran abiertamente contrarios a la adhesión turca), ni entre la opinión pública europea. Las razones esgrimidas van desde el tamaño de su población, a su escaso desarrollo económico, pasando por sus particularidades legislativas. Aunque no nos engañemos. A Turquía no se la quiere, porque es un país pobre e islámico. En cambio, sus defensores esgrimen que forma parte de casi todos los organismos políticos, deportivos y culturales europeos, que su gran mercado será una excelente fuente de oportunidades y que su incorporación puede ser un excelente ejemplo para combatir el radicalismo islámico.

En respuesta a la entrada de Rafael Pampillón sobre la adhesión de Rumanía y Bulgaria, algunos de vosotros habéis resaltado las ventajas derivadas de la incorporación de los países del este. Pero, ¿opináis lo mismo respecto a Turquía?. O dicho de otra manera, ¿se debe dejar a Turquía entrar en la Unión Europea?

8
Nov

Daniel Ortega, presidente de Nicaragua

Escrito el 8 noviembre 2006 por JUAN CARLOS MARTINEZ en América Latina

El Consejo Supremo Electoral de Nicaragua, ha confirmado hoy la victoria electoral en la primera vuelta de Daniel Ortega, por lo que se convertirá en el próximo presidente del país. El líder sandinista vuelve al poder que abandonó hace 16 años, cuando perdió las elecciones ante Violeta Chamorro. Desde entonces, Ortega ha perdido las elecciones en dos ocasiones más, y ha sufrido una importante evolución personal, (que le ha llevado a acercarse al catolicismo), y política. Respecto a ésta última, el sandinismo y el propio Ortega, han dejado en el camino mucho del fervor revolucionario que les caracterizaba, y hoy parecen estar impregnados de un pragmatismo más acorde con la realidad económica y social de la región.

Muchos nicaragüenses han votado por los sandinistas con la esperanza de que mejore su situación económica. No olvidemos que es el segundo país más pobre de Latinoámerica y que el 80% de su población vive en la pobreza. Pero si el retorno de Daniel Ortega y del Frente Sandinista al poder, suscita esperanzas, también despierta temores. Pese a que en sus primeras declaraciones tras ser confirmada su victoria, se ha apresurado a afirmar que no emprenderá cambios radicales en el campo económico, los recelos permanecen. Sobre todo cuando uno escucha las eufóricas felicitaciones con las que le han obsequiado Castro y Chávez, quienes ya dan por hecho que Managua se sumará al eje La Paz – Caracas – La Habana.

Ante Daniel Ortega se abren dos posibles caminos. El primero es volver a aplicar las políticas intervencionistas y revolucionarias del pasado y sumarse a la cruzada contra el “imperialismo yanqui” que preconizan Chávez y Castro. El otro es intentar reducir la pobreza siguiendo el modelo brasileño o chileno, es decir, manteniendo la estabilidad macroeconómica y jurídica. ¿Cuál de ellos seguirá?

Por cierto, resulta curioso que en los últimos meses otros dos expresidentes latinoamericanos han vuelto al poder (me refiero a Oscar Arias en Costa Rica y Alan García en Perú), tras permanecer años alejados de él, dispuestos a demostrar que es incierto lo de “segundas partes nunca fueron buenas”.

8
Nov

¿Debería Polonia entrar en el euro?

Escrito el 8 noviembre 2006 por en Unión Europea

Como ampliación de la entrada de ayer (Consecuencias para España de la entrada de Bulgaria y Rumania en la UE) quisiera hacer unos comentarios sobre Polonia. La pertenencia de Polonia en la Unión Europea ha supuesto, para las empresas polacas, la ampliación de su mercado natural lo que les ha permitido alcanzar elevadas tasas de crecimiento del PIB (4,2% medio anual en 4 años, 2003-6) y de las exportaciones (11,3% de media anual en los últimos 4 años (2003-6)). La apertura al exterior también ha fomentado la llegada de grandes empresa extranjeras incentivadas por los bajos costes salariales, en comparación con el resto de países de la UE, que les permiten producir más barato. Entrada de inversión directa extranjera que cubre en parte la falta de inversión privada nacional. Falta que se debe a que todavía existe una cierta mentalidad estatista que frena el desarrollo del sector empresarial privado lo que genera paro (17% de la población activa en 2006), que va disminuyendo gracias al crecimiento económico y las emigraciones.

La emigración se produce, sobretodo, en trabajadores no cualificada (un tercio de la población activa) que ha encontrado trabajo fuera con una mejor remuneración. También la población con niveles medios de formación acude al exterior para obtener más conocimientos que les permita acceder a puestos futuros bien remunerados ya sea en su país o en el extranjero. Polonia se beneficia así de esta emigración, por un lado recibiendo remesas de divisas de los emigrantes y, por otro, porque aquellos que retornan al país lo hacen con un nivel de formación superior.

Pero Polonia tiene mucho que cambiar: 1) Las infraestructuras son de baja calidad, las carreteras son peligrosas y algunos edificios conservan el aspecto de la Polonia comunista 2) Aproximadamente 15 millones de polacos viven en zonas rurales donde las oportunidades de trabajo y los salarios son bajos lo que ha provocado que muchos polacos emigren para trabajar en países como Inglaterra, Irlanda y Suecia. 3) El elevado índice de corrupción (en un ranking de cero a diez –en el que cero es un país considerado altamente corrupto y diez, altamente transparente–, Polonia acaba de ser calificada con un 3,7) desincentiva la creación de empresas polacas y a la inversión extranjera. 4) El paro es alto aunque se va reduciendo (desde un 20% en 2003 hasta un 16% en 2006). 5) Algunos lugares de trabajo en Polonia son deprimentes y la gestión de los recursos humanos no es buena. 6) Las universidades en Polonia son de nivel más bien bajo. Sin embargo, un estudio reciente de la Comisión Europea señala que entre la población de 20 a 24 años de edad el 90% de la población polaca cuenta con una formación mínima de educación secundaria superior, situándose considerablemente por encima de la media europea que alcanza un 77%.

Quisiera saber tu opinión sobre Polonia pero tengo una inquietud. Eslovenia va a entrar en el euro en enero 2007. Chipre, Lituania, Estonia, Letonia y Malta tienen previsto entrar en enero 2008. Eslovaquia en 2009. Chequia y Hungía en 2010. Pero Polonia no se ha decidido todavía a entrar. Polonia ha conseguido ya una fuerte estabilidad de precios (el último dato es del 1,6% en tasa interanual) ¿Debería Polonia entrar en el euro?

7
Nov

Hace medio lustro, el 1 de mayo de 2004, 10 nuevos países entraron en la Unión Europea, lo que supuso un cambio drástico en la estructura económica de Europa. Se creó un mercado de más de 450 millones de habitantes, un aumento de las relaciones comerciales, dentro de Europa, y un entorno más competitivo. Desde que España entró en la UE, en 1986, hemos recibido cuantiosos fondos estructurales de los países ricos (sobre todo de Alemania y Francia), a cambio nosotros nos convertimos en un importante cliente (compradores) de esos países. Sin embargo la entrada de los 10 nuevos socios no ha generado un aumento sensible del comercio bilateral de España con estos países y es muy posible que haya afectado negativamente a las exportaciones de España al resto de países europeos al ser sustituidas por las de los 10 nuevos países. La posición geográfica de España es muy periférica lo que ha supuesto una desventaja para nuestras relaciones comerciales dentro de la UE, en comparación con países como Alemania, Austria, Francia, Reino Unido o Italia que sí han sabido aprovechar la ampliación. Nosotros estamos pagando la ampliación, en términos de menores fondos europeos. También pagaremos la ampliación del año que viene de Bulgaria y Rumania. Después de la ampliación de 2004 la mayoría de las regiones españolas han dejado de ser Objetivo 1 (aquellas con una renta per cápita menor o igual al 75% de la media comunitaria) y dejarán, por tanto, de percibir fondos estructurales (FEOGA Orientación, FEDER y Fondo Social Europeo) sólo quedarán Andalucía, Extremadura y Galicia, ¿Es esto una amenaza para las regiones españolas que dejarán de percibir fondos? ¿Se convertirán los 12 nuevos países en clientes de España?

El futuro de España en esta Unión Europea ampliada depende de nuestra mejora tecnológica que nos permita aumentar la cuantía y sofisticación de nuestras exportaciones y la capacidad de llevar a cabo inversiones directas en los países candidatos a través del establecimiento de filiales de capital español o realizar joint ventures en esos países. Los 12 países (si incluimos a Bulgaria y a Rumanía) están siendo objetivo claro de la inversión directa extranjera, ya que gozan de menores costes laborales, mano de obra cualificada, y posición geográfica central, junto al eje nórdico Alemania-Norte de Italia. España aunque se diferencia de esos países por tener mejores infraestructuras de transporte y comunicación y mayores dotaciones de capital humano y tecnológico puede sufrir del mal de la “delocalización”.

Una de las ventajas, de este nuevo mercado, desde el punto de vista del consumidor español, será la caída de los precios derivada del incremento de la competencia. Es importante valorar, al hacer este tipo de análisis, que la economía no es un juego de suma cero. Por tanto, si los países de la Europa del Este siguen creciendo y consiguen mayores cotas de riqueza, esto podrá beneficiar también a España en el largo plazo porque nos comprarán. Por ello, la ampliación no debe ser entendida desde España solo como una amenaza sino también como un reto. Reto que implica que nuestro país debe desarrollar sectores de alta y media tecnología y, como consecuencia, realizar un esfuerzo aún mayor en inversiones en I+D para así ser más competitivo.

A corto plazo, nuestra economía sí puede verse perjudicada negativamente por la ampliación. Hay que considerar que las empresas manufactureras de los 12 nuevos Estados presentan una gran similitud con las españolas en cuanto a formación, flexibilidad, costes…etc. Pero, frente a los posibles efectos negativos que sobre la economía española puede tener la ampliación, el resultado final (positivo o negativo) va a depender de lo que seamos capaces de hacer y más concretamente de nuestra capacidad para aumentar nuestro nivel tecnológico. En todo caso la ampliación, tanto la de 2004 como la de 2007, es un nuevo proceso de internacionalización de nuestra economía ¿Están aprovechado las empresas españolas las oportunidades que brinda esta ampliación? ¿Han hecho las empresas españolas los cambios necesarios para competir? ¿La entrada de Bulgaria y Rumania supondrá mayor entrada de inmigrantes procedentes de esos países? ¿Les vamos a vender bienes y servicios?

6
Nov

La economía española se acelera

Escrito el 6 noviembre 2006 por JUAN CARLOS MARTINEZ en Economía española

Según las estimaciones publicadas hoy por el Banco de España, la economía española incrementó su crecimiento en el tercer trimestre hasta el 3,8%. Un ligero repunte de la demanda interna, junto al menor deterioro del sector exterior por el incremento de las exportaciones, parecen ser los responsables de esta aceleración. Por su parte, la Comisión Europea también detecta esa mejoría en las tasas de crecimiento, y apunta a que 2006 finalizará con un crecimiento del 3,8%, tres décimas por encima de sus últimas previsiones.

No hay duda, por tanto, que el famoso “España va bien” continua. La semana pasada los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), situaban la tasa paro en el 8,1%, ligeramente por debajo de la media comunitaria. Además la salud fiscal es excelente, puesto que 2006 volverá a terminar con superávit público. Mientras que países como Alemania o Portugal se ven forzados a incrementar el IVA para intentar cuadrar sus cuentas públicas, en España el año que viene nos permitiremos el lujo de bajar el Impuesto sobre la Renta y el de Sociedades. Y todo esto con los precios del petróleo en las nubes y en plena fase de endurecimiento de la política monetaria por parte del Banco Central Europeo.

Pero no hay que olvidar que tras estos magníficos resultados, los desequilibrios permanecen presentes. La inflación, a pesar de haberse moderado por la reciente disminución del precio del petróleo, sigue aumentando a tasas superiores a las de nuestros socios comerciales; el déficit comercial, continúa su crecimiento imparable; y la productividad disminuyendo. También hoy la Comisión Europea, tras la de cal, daba la de arena: volvía a alertar por enésima vez de los riesgos del endeudamiento familiar asociado a los altos precios de la vivienda. La pregunta es obvia: ¿Es sólida la situación de la economía española?, o ¿es el perfecto ejemplo del gigante con pies de barro?

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