Los acontecimientos de los últimos días suponen el fin de una época para la banca de inversión americana. De los cinco grandes que operaban a principios de año (Morgan Stanley, Goldman Sachs, Bear Stearns, Merrill Lynch, y Lehman Brothers) sólo los dos primeros han sobrevivido a la crisis y, en el caso de que perduren como entidades independientes, su operativa no tendrá nada que ver con la realizada en los últimos años.
La pregunta es cómo pueden haber desaparecido entidades hasta con siglo y medio de historia, que habían sobrevivido a guerras mundiales o a depresiones económicas como la de 1929. Sobre todo, si tenemos en cuenta que tradicionalmente han acaparado los mejores economistas, matemáticos o ingenieros de las universidades americanas. La respuesta es compleja, pues cuando se produce un cambio estructural como el que está afrontando en estos momentos el sistema bancario mundial, detrás hay factores muy diversos: desde los relacionados con el modelo de negocio, hasta los que implican incentivos salariales inadecuados, por no hablar de una regulación extremadamente laxa.
Últimos Comentarios