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Ene

En España el número de universidades se multiplicó desde los años setenta para responder a una creciente demanda de enseñanza superior y también por intereses políticos regionales. Ahora el número de estudiantes en la universidad disminuye un 1,5% medio anual. En España, la onda del descenso de la natalidad alcanzó a la enseñanza universitaria hace siete años, y tras registrar un máximo de 1.587.055 alumnos en el curso 1999-2000 se ha pasado a 1.422.561 en el curso actual (2006-7), es decir, un descenso del 10%, en seis años (164.494 alumnos). Este descenso del 1,5% medio anual repercute en todas las ramas de la enseñanza, con excepción de Ciencias de la Salud, que ha aumentado. Las universidades ofrecen más plazas de las que se demandan en Humanidades y en Ciencias Experimentales, que son los dos sectores donde ha descendido más el número de alumnos. Las caídas más llamativas por autonomías son: País Vasco (-4,7%) y Galicia (-4,2%) ¿Tendrá relación con la política lingüística de esas comunidades autónomas? En Ciencias Sociales y Jurídicas, oferta y demanda están bastante equilibradas. En Ciencias de la Salud no hay plazas para todos los aspirantes, cosa que ocurre en menor medida en las ingenierías, según las titulaciones. En cambio, el número de universidades no ha dejado de crecer. De las 40 universidades existentes en 1990 (35 públicas y 5 privadas) se ha pasado a 71 en 2006 (48 públicas y 23 privadas).


Entre las universidades públicas no ha habido ninguna nueva desde 2000, mientras que han seguido surgiendo universidades privadas. Tras unos años de crecimiento, las privadas acogen al 12% de los estudiantes, pero sus efectivos (en torno a 100.000 alumnos) han empezado también a descender a partir del curso pasado (2005-2006). Curiosamente, el descenso del alumnado en las universidades públicas no ha sido óbice para que crezca el número de profesores. En el curso 2005-2006 se contabilizan en las universidades públicas más de 90.300 profesores (52.300 funcionarios y 38.000 contratados), casi un 16% más que en el curso 1998-1999. La drástica caída del número de alumnos por razones demográficas está desatando y desatará todavía más una durísima competencia, que pondrá en peligro la viabilidad de universidades públicas y privadas. Las universidades con más futuro serán aquellas que ofrezcan más nivel académico (más calidad) y que, por tanto, figuren en los primeros puestos de los ranking de Europa y del mundo. Son a esas universidades dónde irán los buenos alumnos tanto españoles como extranjeros. Ante el declive demográfico y las exigencias de una competencia internacional, en Francia se han anunciado ya las primeras fusiones entre universidades públicas. ¿Se producirán en España un proceso de fusión entre Universidades? ¿Aumentará la flexibilidad universitaria para ofrecer más calidad? ¿Vendrán alumnos de otros países que suplan la falta de alumnos españoles?

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