WP_Post Object
(
    [ID] => 4382
    [post_author] => 13668
    [post_date] => 2006-12-14 15:56:58
    [post_date_gmt] => 2006-12-14 14:56:58
    [post_content] => La semana pasada, Chile y Australia decidieron poner en marcha las negociaciones para  firmar un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países. Con un volumen de comercio bilateral que alcanzó los 260 millones de dólares en 2005, Chile busca con este acuerdo ampliar sus relaciones comerciales con el área de Asia-Pacífico, un destino al que actualmente dirige el 36% de sus exportaciones. Este acuerdo es un paso más en el proceso de internacionalización de la economía chilena. En los noventa, Chile compendió que, debido al pequeño tamaño de su mercado, era necesario fortalecer su presencia en los mercados exteriores.  Desde entonces inició un proceso de apertura basado en la firma de numerosos acuerdos comerciales, que  han permitido mejorar notablemente la posición competitiva su economía.

Chile tiene un Acuerdo de Asociación con la Unión Europea y  TLC´s con Estados Unidos, Canadá, México, Centroamérica y la EFTA (Islandia, Noruega, Suiza y Lienchtenstein). Este año ha firmado con Perú, Panamá y recientemente con Colombia. Pero lo más sorprendente es que su vocación comercial ha encontrado una línea de expansión al otro lado del Pacífico: Corea, Singapur, Brunei, Nueva Zelanda también tienen un TLC con Chile. Con India ha firmado acuerdos comerciales que sin duda, serán ampliados en el futuro. Y actualmente, está negociando con Japón y explorando las posibilidades que ofrecen los mercados de Tailandia y  Malasia. Mención especial merece China. En octubre entró en vigor el TLC entre ambos, el primero que Pekín firma con un país no asiático. Con un comercio bilateral que alcanza los 7.000 millones de dólares,  China  se ha convertido, tras Estados Unidos,  en el segundo socio comercial de Santiago, que en 2005 obtuvo un fuerte superávit de casi 2.000 millones de dólares. De momento, Chile ha sabido como convertir la amenaza china en una oportunidad.

El éxito de esta política comercial es incuestionable. En los once primeros meses de este año, Chile acumula un superávit  comercial de más de 21.000 millones de dólares. Lo que unido al rigor con el que se maneja la política macroeconómica, explican el éxito que viene experimentando su  economía en los últimos años: entre 1995 y 2003, tuvo un crecimiento medio  del  4,6%, y desde entonces lo viene haciendo a tasas superiores al 6%. De alguna manera, Chile está demostrando las ventajas que puede suponer la globalización para una economía pequeña.


    [post_title] => La expansión comercial de Chile
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => la_expansion_co
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2023-12-13 13:55:08
    [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:55:08
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2006/12/la_expansion_co.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 0
    [filter] => raw
)
14
Dic

La expansión comercial de Chile

Escrito el 14 diciembre 2006 por JUAN CARLOS MARTINEZ en América Latina

WP_Post Object
(
    [ID] => 4382
    [post_author] => 13668
    [post_date] => 2006-12-14 15:56:58
    [post_date_gmt] => 2006-12-14 14:56:58
    [post_content] => La semana pasada, Chile y Australia decidieron poner en marcha las negociaciones para  firmar un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países. Con un volumen de comercio bilateral que alcanzó los 260 millones de dólares en 2005, Chile busca con este acuerdo ampliar sus relaciones comerciales con el área de Asia-Pacífico, un destino al que actualmente dirige el 36% de sus exportaciones. Este acuerdo es un paso más en el proceso de internacionalización de la economía chilena. En los noventa, Chile compendió que, debido al pequeño tamaño de su mercado, era necesario fortalecer su presencia en los mercados exteriores.  Desde entonces inició un proceso de apertura basado en la firma de numerosos acuerdos comerciales, que  han permitido mejorar notablemente la posición competitiva su economía.

Chile tiene un Acuerdo de Asociación con la Unión Europea y  TLC´s con Estados Unidos, Canadá, México, Centroamérica y la EFTA (Islandia, Noruega, Suiza y Lienchtenstein). Este año ha firmado con Perú, Panamá y recientemente con Colombia. Pero lo más sorprendente es que su vocación comercial ha encontrado una línea de expansión al otro lado del Pacífico: Corea, Singapur, Brunei, Nueva Zelanda también tienen un TLC con Chile. Con India ha firmado acuerdos comerciales que sin duda, serán ampliados en el futuro. Y actualmente, está negociando con Japón y explorando las posibilidades que ofrecen los mercados de Tailandia y  Malasia. Mención especial merece China. En octubre entró en vigor el TLC entre ambos, el primero que Pekín firma con un país no asiático. Con un comercio bilateral que alcanza los 7.000 millones de dólares,  China  se ha convertido, tras Estados Unidos,  en el segundo socio comercial de Santiago, que en 2005 obtuvo un fuerte superávit de casi 2.000 millones de dólares. De momento, Chile ha sabido como convertir la amenaza china en una oportunidad.

El éxito de esta política comercial es incuestionable. En los once primeros meses de este año, Chile acumula un superávit  comercial de más de 21.000 millones de dólares. Lo que unido al rigor con el que se maneja la política macroeconómica, explican el éxito que viene experimentando su  economía en los últimos años: entre 1995 y 2003, tuvo un crecimiento medio  del  4,6%, y desde entonces lo viene haciendo a tasas superiores al 6%. De alguna manera, Chile está demostrando las ventajas que puede suponer la globalización para una economía pequeña.


    [post_title] => La expansión comercial de Chile
    [post_excerpt] => 

    [post_status] => publish
    [comment_status] => open
    [ping_status] => closed
    [post_password] => 
    [post_name] => la_expansion_co
    [to_ping] => 
    [pinged] => 
    [post_modified] => 2023-12-13 13:55:08
    [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:55:08
    [post_content_filtered] => 
    [post_parent] => 0
    [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/archives/2006/12/la_expansion_co.php
    [menu_order] => 0
    [post_type] => post
    [post_mime_type] => 
    [comment_count] => 0
    [filter] => raw
)

La semana pasada, Chile y Australia decidieron poner en marcha las negociaciones para firmar un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países. Con un volumen de comercio bilateral que alcanzó los 260 millones de dólares en 2005, Chile busca con este acuerdo ampliar sus relaciones comerciales con el área de Asia-Pacífico, un destino al que actualmente dirige el 36% de sus exportaciones. Este acuerdo es un paso más en el proceso de internacionalización de la economía chilena. En los noventa, Chile compendió que, debido al pequeño tamaño de su mercado, era necesario fortalecer su presencia en los mercados exteriores. Desde entonces inició un proceso de apertura basado en la firma de numerosos acuerdos comerciales, que han permitido mejorar notablemente la posición competitiva su economía.

Chile tiene un Acuerdo de Asociación con la Unión Europea y TLC´s con Estados Unidos, Canadá, México, Centroamérica y la EFTA (Islandia, Noruega, Suiza y Lienchtenstein). Este año ha firmado con Perú, Panamá y recientemente con Colombia. Pero lo más sorprendente es que su vocación comercial ha encontrado una línea de expansión al otro lado del Pacífico: Corea, Singapur, Brunei, Nueva Zelanda también tienen un TLC con Chile. Con India ha firmado acuerdos comerciales que sin duda, serán ampliados en el futuro. Y actualmente, está negociando con Japón y explorando las posibilidades que ofrecen los mercados de Tailandia y Malasia. Mención especial merece China. En octubre entró en vigor el TLC entre ambos, el primero que Pekín firma con un país no asiático. Con un comercio bilateral que alcanza los 7.000 millones de dólares, China se ha convertido, tras Estados Unidos, en el segundo socio comercial de Santiago, que en 2005 obtuvo un fuerte superávit de casi 2.000 millones de dólares. De momento, Chile ha sabido como convertir la amenaza china en una oportunidad.

El éxito de esta política comercial es incuestionable. En los once primeros meses de este año, Chile acumula un superávit comercial de más de 21.000 millones de dólares. Lo que unido al rigor con el que se maneja la política macroeconómica, explican el éxito que viene experimentando su economía en los últimos años: entre 1995 y 2003, tuvo un crecimiento medio del 4,6%, y desde entonces lo viene haciendo a tasas superiores al 6%. De alguna manera, Chile está demostrando las ventajas que puede suponer la globalización para una economía pequeña.

Comentarios

Aún no hay comentarios.

Dejar un Comentario

*

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle contenido relacionado con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información aquí. Aceptar