WP_Post Object ( [ID] => 21705 [post_author] => 13322 [post_date] => 2016-07-23 23:59:10 [post_date_gmt] => 2016-07-23 21:59:10 [post_content] => Una buena lectura para el verano sería la gran novela de Dickens, Historia de dos Ciudades donde en los años previos a la Revolución Francesa se desarrollaba una gran trama paralelamente entre Londres y París. La primera era símbolo del orden y la tranquilidad mientras que la segunda representaba la incertidumbre y la agitación. Desde el referéndum del Brexit, el pasado 23 de Junio, la pregunta que nos hacemos todos es ¿Y ahora qué? Entre los muchos vaticinios sobre lo que pasará dentro de dos años aparece recurrentemente la comparación con Noruega. .-Primera similitud, la fecha de petición de ingreso. Un primer dato, quizás no muy conocido, es que aunque Noruega no pertenece a la Unión Europea, en 1963 fueron dos los países que solicitaron su ingreso en el mercado común del viejo continente: El país escandinavo y el Reino Unido. Cuando Francia rechazó la solicitud del Reino Unido, se suspendieron las negociaciones de adhesión con Noruega, Dinamarca, Irlanda y el Reino Unido, repitiéndose este punto en dos ocasiones. .-Segunda similitud, divergencia entre los deseos del partido gobernante y los ciudadanos. En 1972 y 1994, a pesar del gran interés de los gobiernos que hubo en cada momento en Noruega para entrar en la UE, la ciudadanía rechazó por dos veces la integración en sendos referéndums. Los resultados no fueron abrumadores sino que mostraron una ciudadanía dividida (53,5%/52,5% en contra- 46,5%/47,8% a favor). El resultado en la consulta del Brexit fue de 51,9% Vs 48,1%. .-Tercera similitud, la economía. Hasta el final de la primera guerra mundial, Noruega era uno de los países con menor renta de Europa, en el que la agricultura, la ganadería y la pesca eran la fuente principal de ingresos. El descubrimiento de los yacimientos de petróleo en el Mar del Norte en 1969 transformo a Noruega en uno de los países más ricos del mundo, con un PIB por habitante de USD 76.930 (5,2Millones de habitantes). El Reino Unido produce petróleo y gas para cubrir tres cuartas partes de sus necesidades y ha mantenido en las últimas décadas una política de bajos impuestos sobre los beneficios empresariales que ha disparado la Inversión Extranjera Directa en el país, principalmente en el sector servicios. La renta per cápita del país está entre las 25 primeras del mundo con un importe cercano a los USD 45.000 (64,5Millones de habitantes). .-Cuarta Similitud, la moneda. Ambos países han contado con una moneda propia históricamente apreciada respecto al Euro. Finalmente señalar que una posible quinta similitud se podría basar en la actual relación de Noruega con la Unión Europea, si se replica el modelo para los británicos: Actualmente, el fundamento de las relaciones de Noruega con la Unión Europea se establece en su pertenencia al Espacio Económico Europeo (EEE). Desde su entrada en vigor en 1994, este acuerdo une a los Estados miembros de la Unión Europea con los que forman la Asociación Europea de Libre Cambio (AELC o EFTA) excepto Suiza, formando un mercado interior común que permite la libertad de personas, bienes, servicios y capitales. Están fuera del acuerdo la política agrícola común y las políticas de pesca, la unión aduanera, la política comercial común, la unión económica y monetaria, la política exterior y de seguridad común, y los asuntos de justicia e interior (aunque los países AELC son parte del Espacio Schengen). Por tanto, las leyes en relación con el mercado europeo son de aplicación también en Noruega. Además de formar parte del Acuerdo Schengen, así como de Europol y Eurojust, Noruega coopera con la UE en misiones policiales. El país nórdico también colabora con Frontex en la gestión de las fronteras exteriores de la UE, siendo la frontera de Noruega de gran importancia para la UE, ya que el acuerdo de la Unión Nórdica de Pasaportes suprimió los controles fronterizos entre Noruega y Suecia, por lo que la frontera exterior noruega representa la frontera europea. Es decir una adhesión en el 2018 del Reino Unido a la Unión Europea en los mismos términos actuales de Noruega supondría una situación confortable para los británicos y no excesivamente alarmante para el resto de los países que configuran la Unión. Feliz Verano [post_title] => Historia de dos Ciudades:Oslo y Londres [post_excerpt] => [post_status] => publish [comment_status] => open [ping_status] => open [post_password] => [post_name] => historia-de-dos-ciudadesoslo-y-londres [to_ping] => [pinged] => [post_modified] => 2023-12-13 13:55:29 [post_modified_gmt] => 2023-12-13 12:55:29 [post_content_filtered] => [post_parent] => 0 [guid] => https://economy.blogs.ie.edu/?p=21705 [menu_order] => 0 [post_type] => post [post_mime_type] => [comment_count] => 1 [filter] => raw )
Una buena lectura para el verano sería la gran novela de Dickens, Historia de dos Ciudades donde en los años previos a la Revolución Francesa se desarrollaba una gran trama paralelamente entre Londres y París. La primera era símbolo del orden y la tranquilidad mientras que la segunda representaba la incertidumbre y la agitación.
Desde el referéndum del Brexit, el pasado 23 de Junio, la pregunta que nos hacemos todos es ¿Y ahora qué? Entre los muchos vaticinios sobre lo que pasará dentro de dos años aparece recurrentemente la comparación con Noruega.
.-Primera similitud, la fecha de petición de ingreso.
Un primer dato, quizás no muy conocido, es que aunque Noruega no pertenece a la Unión Europea, en 1963 fueron dos los países que solicitaron su ingreso en el mercado común del viejo continente: El país escandinavo y el Reino Unido. Cuando Francia rechazó la solicitud del Reino Unido, se suspendieron las negociaciones de adhesión con Noruega, Dinamarca, Irlanda y el Reino Unido, repitiéndose este punto en dos ocasiones.
.-Segunda similitud, divergencia entre los deseos del partido gobernante y los ciudadanos.
En 1972 y 1994, a pesar del gran interés de los gobiernos que hubo en cada momento en Noruega para entrar en la UE, la ciudadanía rechazó por dos veces la integración en sendos referéndums. Los resultados no fueron abrumadores sino que mostraron una ciudadanía dividida (53,5%/52,5% en contra- 46,5%/47,8% a favor). El resultado en la consulta del Brexit fue de 51,9% Vs 48,1%.
.-Tercera similitud, la economía.
Hasta el final de la primera guerra mundial, Noruega era uno de los países con menor renta de Europa, en el que la agricultura, la ganadería y la pesca eran la fuente principal de ingresos. El descubrimiento de los yacimientos de petróleo en el Mar del Norte en 1969 transformo a Noruega en uno de los países más ricos del mundo, con un PIB por habitante de USD 76.930 (5,2Millones de habitantes). El Reino Unido produce petróleo y gas para cubrir tres cuartas partes de sus necesidades y ha mantenido en las últimas décadas una política de bajos impuestos sobre los beneficios empresariales que ha disparado la Inversión Extranjera Directa en el país, principalmente en el sector servicios. La renta per cápita del país está entre las 25 primeras del mundo con un importe cercano a los USD 45.000 (64,5Millones de habitantes).
.-Cuarta Similitud, la moneda.
Ambos países han contado con una moneda propia históricamente apreciada respecto al Euro.
Finalmente señalar que una posible quinta similitud se podría basar en la actual relación de Noruega con la Unión Europea, si se replica el modelo para los británicos: Actualmente, el fundamento de las relaciones de Noruega con la Unión Europea se establece en su pertenencia al Espacio Económico Europeo (EEE). Desde su entrada en vigor en 1994, este acuerdo une a los Estados miembros de la Unión Europea con los que forman la Asociación Europea de Libre Cambio (AELC o EFTA) excepto Suiza, formando un mercado interior común que permite la libertad de personas, bienes, servicios y capitales.
Están fuera del acuerdo la política agrícola común y las políticas de pesca, la unión aduanera, la política comercial común, la unión económica y monetaria, la política exterior y de seguridad común, y los asuntos de justicia e interior (aunque los países AELC son parte del Espacio Schengen). Por tanto, las leyes en relación con el mercado europeo son de aplicación también en Noruega.
Además de formar parte del Acuerdo Schengen, así como de Europol y Eurojust, Noruega coopera con la UE en misiones policiales. El país nórdico también colabora con Frontex en la gestión de las fronteras exteriores de la UE, siendo la frontera de Noruega de gran importancia para la UE, ya que el acuerdo de la Unión Nórdica de Pasaportes suprimió los controles fronterizos entre Noruega y Suecia, por lo que la frontera exterior noruega representa la frontera europea.
Es decir una adhesión en el 2018 del Reino Unido a la Unión Europea en los mismos términos actuales de Noruega supondría una situación confortable para los británicos y no excesivamente alarmante para el resto de los países que configuran la Unión.
Feliz Verano
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