Archivo de abril/2009

30
Abr

La crisis se agudiza

Escrito el 30 abril 2009 por María Jesús Valdemoros en Uncategorized

Ayer conocíamos, con la publicación del último boletín económico del Banco de España, los primeros datos de la evolución del PIB español en el primer trimestre de 2009. Esta primera evidencia es demoledora, mucho peor de lo que se anticipa hace unos meses. Las estimaciones de la entidad presidida por Miguel Ángel Fernández Ordóñez apuntan a una caída muy intensa de la actividad entre enero y marzo del presente año, tanto que el PIB podría haber retrocedido un 2,9% en términos interanuales y un 1,8% en tasa intertrimestral. Con los malos datos de la EPA, ya comentados por otros compañeros en este blog, no queda otra que revisar a la baja las previsiones anteriores. 

Detrás de las tasas de caída del PIB hay tendencias realmente preocupantes. Por ejemplo, por el lado de la oferta nos encontramos no sólo con que la construcción y la industria siguen en caída libre, sino también con que «los servicios empezaron a dar signos de estancamiento». Por el lado de la demanda agregada, el Banco de España estima una contracción adicional de la demanda nacional, cuya tasa interanual cae otros 2 puntos, hasta situarse en el –4,9%. En este caso, lo más preocupante es la caída (ligera todavía) de la aportación que la demanda exterior neta hace al crecimiento, hasta situarse en 2,2 puntos, resultado de la fuerte contracción que está experimentando el comercio mundial. En este caso, la aportación sigue siendo positiva porque las exportaciones españolas caen a un ritmo inferior al de las importaciones. Señalar asimismo, que la contracción de la demanda está reflejándose en la evolución de los precios. Hoy precisamente se ha publicado la tasa española de inflación armonizada, que se situó en abril de nuevo en el -0,1% interanual, lo que representa el segundo registro negativo interanual en toda la historia de este indicador nacido en 1997. 

Fuera de nuestras fronteras las cosas tampoco mejoran. Ayer se conocían también los datos avanzados del PIB estadounidense, que sufrió en el primer trimestre una caída del 1,6%, equivalente a una tasa anualizada del 6,1%, tan sólo dos décimas mejor al finalizar 2008, debido a la caída a plomo de la inversión empresarial y residencial (el dato esperanzador fue cierto repunte del consumo). Para hacernos una idea de la magnitud de las cifras, EEUU se encuentra en el tercer trimestre consecutivo de caída del PIB, algo que no sucedía desde 1974. Y los últimos seis meses han sido el peor semestre de los últimos 50 años.

En Europa, el panorama no es mucho mejor. El Gobierno alemán anunciaba, también ayer, sus previsiones de crecimiento, peores que las disponibles hasta ahora. El ejecutivo alemán sitúa la caída del PIB a lo largo de 2009 nada menos que en el 6%, como resultado en gran parte de la contracción del comercio mundial (Alemania es la gran potencia comercial del planeta). Según esas previsiones, la recuperación podría comenzar en 2010 gracias a un ligero crecimiento del 0,5%. 

De todos modos, creo que conviene recordar que la economía española padece males propios que, aunque agravados por la situación internacional, no se corregirán cuando se produzca la ansiada recuperación en el resto del mundo. Pensemos, por citar el flanco más débil de nuestra economía, en el mercado laboral. Alemania, que como decimos podría ver caer su PIB en un 6%, contempla en el peor de los escenarios una cifra de 3,7 millones de parados para este año. España, con una población que es aproximadamente la mita de la alemana, ya ha superado los 4 millones de desempleados. Algo habrá que hacer, ¿no creen?

29
Abr
29
Abr

Uno de los temas económicos más inesperado de la semana pasada fueron los resultados del mercado de trabajo y el desempleo en España durante el primer trimestre de este año. Efectivamente, según informó el INE,  durante el primer trimestre del año el desempleo aumentó de forma terrible alcanzando al 17,4% de la población activa. Los datos agregados pasaron por encima de una realidad mucho más alarmante cuando se analiza la Encuesta de Población Activa en profundidad y más concretamente cuando se estudia el aumento del paro entre la población inmigrante.

Los extranjeros se animan y los españoles se desaniman

Además, está surgiendo una extraña dualidad en el mercado de trabajo: Mientras la población activa española se reduce la población activa inmigrante aumenta. O lo que es lo mismo mientras los españoles abandonan desanimados el mercado de trabajo porque no encuentran empleo cada vez hay más extranjeros que se incorporan a ese mismo mercado laboral. Es decir, a pesar del aumento del paro y de la destrucción de empleo la inmigración en España sigue aumentando. Efectivamente, el número total de activos inmigrantes alcanzó en el primer trimestre de este año los 3.724.500 con un aumento de 58.600 personas respecto al trimestre precedente. La tasa de actividad en la población extranjera se situó en el 78%, lo que supone 68 centésimas más que al cierre de 2008 mientras que la tasa de actividad de la población española se redujo levemente hasta situarse en el 57,61%.

Tasa de desempleo

Valentín Bote dejó constancia en este mismo blog de los 4.000.000 de parados que hay en España que sitúa la tasa de paro en el 17,4%. Pero, según la  Encuesta de Población Activa publicada por el INE, la tasa de desempleo entre la población extranjera fue mucho mayor que en el conjunto nacional ya que se disparó en el primer trimestre de 2009, remontando hasta el 28,4%, cuando el año 2008 había terminado con un paro inmigrante del 21,8%. Eso significa que el desempleo extranjero creció en 278.000 personas en el primer trimestre de este año y que como consecuencia el número total de desempleados inmigrantes superó también en el primer trimestre del año 1.050.000 de personas, la cifra más alta de la serie histórica, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada por el INE.

El número de ocupados inmigrantes desciende

En cuanto al número de ocupados, en el primer trimestre se destruyeron 219.500 empleos extranjeros netos, con lo que el número de ocupados extranjeros se situó en 2.667.000 personas. Esta caída en la ocupación explica la fuerte caída en las remesas de emigrantes.

28
Abr

El desastre tecnológico español.

Escrito el 28 abril 2009 por en Uncategorized

Hoy el Instituto Nacional de Estadística de España ha publicado los datos de comercio exterior de productos de alta tecnología para el año 2007. Las exportaciones españolas en este concepto totalizaron 8.023,6 millones de euros en 2007, lo que supone un descenso del 4,3% con respecto a 2006. Por su parte, las importaciones alcanzaron los 27.597,6 millones de euros, con un aumento del 6,8% respecto al año anterior. La balanza de productos de alta tecnología arrojó un saldo negativo de 19.574 millones de euros (ver cuadro).

¿Qué le ocurrió en 2006 al comercio exterior de productos de alta tecnología?

Un desastre  muy parecido al de 2007 (ver cuadro). Efectivamente, en 2006 las exportaciones de este tipo de productos fueron de 8.379,8 millones de euros lo que supuso un descenso del 8% con respecto a 2005. Por su parte, también en 2006, las importaciones alcanzaron los 25.849,1 millones de euros, con un aumento del 4,3%, con respecto a 2005. La balanza de productos de alta tecnología arrojó un saldo negativo de 17.469 millones de euros.

Es evidente que el comercio exterior de productos de alta tecnología es un indicador de la situación tecnológica de un país. La exportación de este tipo de bienes es el resultado del nivel de competitividad y del esfuerzo en I+D+i. El análisis de los datos publicados hoy son preocupantes ya que muestran una tendencia descendente de la tasa de cobertura y un aumento del déficit tecnológico (saldo negativo) con respecto a 2006. Qué las importaciones crezcan a ritmos del 7% y las exportaciones se reduzcan rápidamente no es una buena noticia y manifiestan la fuerte dependencia tecnológica de España con el exterior cuya raíz está en la falta de tecnología propia. Lo que ya sabíamos: España importa mucha tecnología y exporta poca. 

Comercio exterior español de productos de alta tecnología (en millones de euros corrientes)

  Importación (M) Exportación (X) Saldo Cobertura X/M (%)
2005 24.779 9.110 -15.669 37
2006 25.849 8.380 -17.469 32
2007 27.598 8.024 -19.574 29

Fuente: INE

Dicho de otra manera, el análisis de datos del comercio exterior de productos de alta tecnología muestra que en 2005 la tasa de cobertura del comercio exterior de productos de alta tecnología fue de 37%. A partir de ese año comienza una tendencia descendente de la tasa de cobertura hasta llegar en 2007 al 29%. ¿Qué significa esta caída? Qué las importaciones crecen más rápidamente que las exportaciones. Este crecimiento en las importaciones mayor que el de las exportaciones ha ido aumentando rápidamente el déficit exterior de productos de alta tecnología, tal como se observa en el cuadro. 

El origen del creciente y elevado déficit exterior de productos de alta tecnología, se puede encontrar en los reducidos gastos en I+D. Porque aunque España ha incrementado, en la última década, la inversión en I+D, continúa aún posicionada en niveles de innovación inferiores a los de la UE. Los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y la Oficina Estadística Europea EUROSTAT muestran que el gasto en I+D/ PIB en 2007 fue del 1,27 por 100, mientras que el gasto medio de la UE, fue del 1,83 por 100 y muy lejos, de países como Suecia o Finlandia, que superan el 3% del PIB. Situación que manifestábamos hace unos días cuando publicamos en este blog los datos de balanza de pagos de royalties de 2008.

28
Abr

P2P : ¿quien gana y quien pierde?

Escrito el 28 abril 2009 por Patricia Gabaldón en Miscelánea, Uncategorized

Llevamos unos meses escuchando que el intercambio de archivos entre personas en Internet (P2P) quiere ser regulado por el Gobierno, y algunos organismos plantean la opción de crear un canon, parecido al que ahora pagamos con los DVDs, los CDs, etc. vírgenes, sobre los operadores de Internet para compensar las pérdidas del mercado en forma de ventas, por el intercambio de estos archivos. Todo este tema está en el límite de la legalidad, ya que si el intercambio de archivos (películas, música y demás) es voluntario y se realiza sin ánimo de lucro, parece que no es punible. Lo que echo de menos en este discurso es que siempre se enfoca esta cuestión desde el punto de vista de los artistas que dejan de vender discos o que tienen menos espectadores viendo sus películas, y esta versión me parece un poco escasa. – En Holanda, ya se realizó este estudio, y parece que en este país los efectos del P2P sobre la economía son positivos –  

Desde luego que si la decision de compra está entre : una opción con coste/precio cero de conseguir cualquier tipo de producto (y además, de manera más cómoda), y una opcion con un precio relativamente alto segun que renta, la solucion casi obvia es no pagar. Solo que en el caso del P2P nos movemos en un mercado de free-riders casi universal, es decir, solo la primera persona que compró el CD pagó por él y el resto lo disfrutan sin pagar por él. Hasta aqui, es sencillo entender las protestas de los artistas, al dejar de recibir ingresos por sus actividades profesionales. Pero este analisis es de corto plazo, porque si bien la reducción de ingresos inicial es evidente, no sabemos cual va a ser la evolución de ese mercado/artista en el largo plazo. Vaya, que incluso podemos encontrarnos con alguien que prefiera esta fórmula de distribucion gratuita de su produccion artística para después recibir más invitaciones y público a sus conciertos, y sobrevivir en el largo plazo.

Este no es el único beneficio que tiene esta forma de distribución en el largo plazo: la democratización del acceso para el público es esencial y tampoco se suele incluir en muchos de los discursos sobre este tema. Los bienes y servicios culturales son relativamente caros, especialmente porque tienen un riesgo incorporado: solo sabes si lo has disfrutado despues de arriesgarte a su compra, es decir, solo sabes si te ha gustado una película después de haber pagado la entrada, o solo sabes si disfrutas de las obras literarias de un autor, después de haberlo comprado. Si el precio inicial de acceso es bajo (o cero, como en este caso), las posibilidades de que cualquier consumidor se inicie en el consumo de estos bienes y servicios son muchas. A partir de ese momento, la adicción racional, como la nombró Gary Becker, podría empezar a funcionar y los consumidores, si realmente disfrutan de esta actividad, estarán dispuestos a pagar un precio mucho más alto por ella (para acudir a un concierto, por ejemplo).

Además, Internet y el P2P permiten que la cultura en su sentido más amplio estén al alcance de cualquiera que tenga una conexión a Internet, lo que seguro que en el largo plazo tiene efectos muy positivos en la economía de cualquier país, es decir, al universalizar el acceso, permiten la democratización de la cultura. Seguramente tenga que ser regulado de alguna manera, pero si el préstamo de libros/CDs es gratuito en bibliotecas/discotecas, se me escapa un poco por qué el prestamo de archivos del mismo tipo cultural no pueden ser intercambiados de la misma manera, solo que con un formato diferente…

A veces pienso que seguramente Internet y el P2P sea como la radio cuando empezó a funcionar, que los artistas pensaban que si el público escuchaba su música por la radio ya no compraría sus discos, igual solo tenemos que adaptarnos a una realidad cambiante… como decía al principio, puede que haga falta ampliar el el discurso paraa conocer el efecto global, incluyendo todos los puntos de vista.

27
Abr

Brotes verdes y perspectivas a medio plazo

Escrito el 27 abril 2009 por José Ramón Diez Guijarro en Economía española, Economía Mundial

Durante el fin de semana, algunas de las más importantes publicaciones económicas del mundo se han centrado en determinar si la mejora en algunos indicadores económicos estaría anticipando un cambio de tendencia en el ciclo de actividad en los próximos meses. Es decir, si los incipientes «brotes verdes» que se perciben en algunos datos, pueden dar paso a una mejora consistente del crecimiento. Para centrar el debate, lo primero que debemos recordar es lo que pasó en los últimos meses de 2008 y primeras semanas de 2009. Ante una fuerte caída de la demanda mundial, los productores de todo el mundo procedieron a realizar un drástico recorte de la oferta, lo que conllevó el mayor ajuste de las últimas décadas en los datos de actividad, producción industrial o  exportaciones. Como recordó hace una semana el FMI, el crecimiento mundial se ha reducido a ritmos anualizados próximos al 7,5% en los últimos seis meses. Al hilo de esos datos negativos de actividad, los mercados de valores experimentaron fuertes retrocesos desde la segunda semana de enero hasta mediados de marzo. La sobrerreacción de la producción y de las bolsas conllevó unos niveles de existencias muy reducidos en buena parte del planeta, así como unas valoraciones muy baratas de grandes compañías internacionales. Por tanto, era lógico que se produjera una corrección en el comportamiento de los mercados de valores, así como una recomposición de los «stocks», favorecida además por los efectos positivos sobre el consumo potencial que pueden conllevar la bajada de la inflación y de los tipos de interés.

Pero como advierte «The Economist» en su último número, un excesivo optimismo podría llevarnos en estos momentos a cometer dos tipos de errores: confundir una recuperación con una moderación del ritmo de caída de los indicadores (lo que los economistas llamamos segunda derivada) y, sobre todo, que los políticos caigan en una ruinosa complacencia ante esas mejoras incipientes de la confianza y de algunas noticias económicas.  En ese sentido, para hablar de algo más que de tocar fondo a mediados o finales de este año, será fundamental una definitiva normalización de los mercados mayoristas de financiación y, sobre todo, que se vuelva a crear empleo. Para ello, será necesaria una reestructuración del sistema financiero en la mayoría de países y, en muchos otros, una mejora del funcionamiento del mercado de trabajo. Esas son tareas urgentes que deberán abordar a nivel nacional los diferentes gobiernos.

Sobre todo, porque como también nos recordaba la prestigiosa revista británica, no cabe esperar un retorno a la situación de antes de la crisis, los próximos años se van a caracterizar por los efectos de una pesada digestión tras los excesos de principios de esta década o, lo que es lo mismo, por unos crecimientos potenciales mucho más bajos de lo que estábamos acostumbrados en los días de vino y rosas. En este sentido, es muy interesante el informe sobre la economía española publicado por el FMI la semana pasada. Según sus autores, en ausencia de reformas de calado, el crecimiento potencial de nuestro país podría estancarse en la zona del 1,5%-2%. Esto es muy preocupante si pensamos en el número de parados con el que entraremos en el próximo ciclo de actividad y los ritmos de crecimiento que tradicionalmente necesita la economía para crear empleo. Por tanto, sin abandonar el corto plazo, urge empezar a dedicar la mayoría de esfuerzos a mejorar la competitividad de nuestro país para cuando el ciclo cambie. Propuestas como la presentada la semana pasada por FEDEA para mejorar el comportamiento de nuestro mercado de trabajo y, apoyada por un buen número de prestigiosos economistas españoles, no deberían caer en saco roto.

26
Abr

Con motivo del décimo aniversario de la fundación del euro la Fundación Robert Schuman ha entrevistado a Jean-Claude Trichet, Presidente del Banco Central Europeo. De la entrevista extraigo 3 preguntas que he retocado y que pueden resultar útiles para aquellos lectores menos familiarizados con la moneda única:

1. ¿Cuál es el balance de la primera década de existencia del euro? 

Actualmente, 329 millones de europeos de dieciséis países comparten una moneda común que responde a la promesa formulada por los padres fundadores de la Unión Económica y Monetaria (UEM): una moneda que mantenga su valor, inspire confianza y goce de la misma estabilidad y credibilidad que las monedas más sólidas a las que sustituya. Hace diez años muchos creían que esta promesa no llegaría a realizarse y que la moneda única estaba avocada al fracaso. 

Desde la introducción del euro el 1 de enero de 1999 los ciudadanos europeos han disfrutado de un nivel de estabilidad de precios sólo comparable al logrado por unos pocos países. La estabilidad de precios favorece directamente a los ciudadanos europeos, pues protege sus rentas y ahorros y contribuye a reducir los costes de endeudamiento, lo que fomenta la inversión, la creación de empleo y el bienestar duradero. El euro ha sido un factor del dinamismo de la economía europea. Ha reforzado la transparencia de precios, ha intensificado el comercio, y ha promovido la integración económica y financiera en la zona de euro y en todo el mundo. 

En los últimos meses hemos observado otra de las ventajas del euro: la crisis financiera ha demostrado que en momentos de tempestad es mejor viajar en un buque grande, resistente y seguro, que en una pequeña embarcación. ¿Habría podido Europa actuar con tanta rapidez, firmeza y coherencia si no hubiéramos tenido una moneda única que nos uniese? ¿Habríamos podido proteger de los efectos de la crisis financiera tantas monedas nacionales distintas? Las autoridades europeas, los parlamentos, los gobiernos y los bancos centrales han demostrado que Europa tiene capacidad para adoptar decisiones, incluso en las circunstancias más difíciles. 

El euro ofrece ventajas a los países que decidieron adoptarlo. No obstante, no es tiempo para la complacencia. El momento actual presenta dificultades graves y en el futuro surgirán nuevos retos y perturbaciones. Ha de reforzarse y consolidarse el éxito de la UEM y los beneficios que el euro ha traído consigo. Los ciudadanos de la zona del euro pueden confiar en que el Eurosistema, formado por el BCE y los dieciséis bancos centrales nacionales de la zona del euro1, hará lo que sea necesario para garantizar la estabilidad financiera y monetaria.  

2. Suele decirse que el euro ha dado lugar a un aumento de los precios. ¿Está justificado este comentario? ¿Qué consecuencias ha tenido la introducción de la moneda única para el poder adquisitivo de los ciudadanos europeos? ¿Ha beneficiado el euro a los trabajadores?  

En general, los primeros diez años del euro han traído reducidos niveles de inflación en la zona del euro, inferiores a los que existían anteriormente en cada uno de los países. Durante estos diez años hemos logrado mantener la inflación estable en la zona del euro, situándose la inflación media anual en tasas próximas al 2%. Éste es un buen resultado, habida cuenta del rápido aumento de los precios de las materas primas y de la energía durante este período, y esta cifra es significativamente inferior a la tasa media de inflación de la década anterior a la introducción del euro. 

No obstante, es cierto que ciertos sectores de algunos países europeos trataron de aprovechar la puesta en circulación del efectivo en euros el 1 de enero de 2002 para elevar algunos precios. De acuerdo con un estudio de Eurostat, los efectos de la introducción del euro pueden haber dado lugar a un incremento medio del Índice Armonizado de Precios de Consumo de entre el 0,1% y el 0,3% entre diciembre del 2001 y enero del 2002. Puesto que se trató de un fenómeno aislado, no parece significativo si se consideran los diez años de existencia del euro. 

Desearía subrayar que el euro no ha sido un obstáculo para la creación de empleo, como en ocasiones se lee y se oye. Por el contrario, durante los diez primeros años del euro, la población ocupada ha aumentado en torno a dieciséis millones, mucho más que en Estados Unidos en el mismo período. En los últimos diez años se han creado muchos más empleos en la zona del euro que en la década anterior a la introducción de la moneda única.

3. El mundo atraviesa actualmente una crisis financiera muy importante ¿cuáles son las claves de la recuperación económica de la Unión?

 Sobre la base de nuestra información más reciente, nuestras previsiones continúan apuntando a una persistente debilidad de la actividad económica en la zona del euro en los próximos trimestres. De acuerdo con las proyecciones macroeconómicas del FMI, el crecimiento anual medio del PIB real en la zona del euro se situará en el -4,2% en el 2009, y en el -0,4% en el 2010.

La economía mundial atraviesa un período de fuerte desaceleración, debido a que los efectos adversos de las turbulencias financieras sobre la actividad económica real se han visto agravados por una fuerte contracción del comercio internacional. En este contexto, se espera que la zona del euro se enfrente a un período prolongado de debilidad económica severa: la disminución de la demanda exterior afectará negativamente a las exportaciones y a la inversión, y el deterioro de la situación de los mercados de trabajo y el reducido nivel de confianza posiblemente desanimen el consumo. Teniendo en cuenta estos elementos, la recuperación en el curso del 2010 será producirá probablemente de forma moderada en base a la mejora gradual del entorno internacional y a la atenuación de las tensiones de los mercados financieros. 

Desearía subrayar que la situación actual es también particularmente compleja debido al nivel excepcionalmente elevado de incertidumbre. No obstante, estoy convencido de que con el tiempo la zona del euro se beneficiará de distintos factores. En particular, no debemos olvidar que el considerable descenso de los precios de las materias primas desde mediados del 2008 continuará apoyando de forma no despreciable a la renta real disponible y, por ende, al consumo, durante los próximos meses. Asimismo, las importantes medidas que se han adoptado en los últimos meses para hacer frente a las turbulencias financieras deberían contribuir a restablecer la confianza en el sistema financiero y a suavizar las restricciones en la oferta de crédito a empresas y hogares. 

Por último, el fortalecimiento de la confianza es un elemento clave para superar la actual situación económica. Los gobiernos y los bancos centrales de la Unión Europea están haciendo todo lo posible para preservar, mejorar y reforzar la confianza. Por lo que al BCE respecta, nuestra institución debe, más que nunca, servir de ancla para la estabilidad y la confianza.

¿Se convertirá el euro en la moneda del futuro?

¿Será el euro la moneda más importante del mundo?

 

 

25
Abr

La crisis en Latinoamerica

Escrito el 25 abril 2009 por Miguel Aguirre Uzquiano en América Latina

Una de las decisiones tradicionales para la deslocalización o internacionalización de las empresas era y es la diversificación del riesgo.  Cuando los mercados locales desfallecían, mercados emergentes servían para mantener el crecimiento esperado.

Durante los últimos cinco años Latinoamérica ha sido uno de las principales zonas en las que empresas europeas han buscado consumidores potenciales.  Desde 1945 se ha vivido el periodo  de crecimiento más elevado en la zona. ¿Por qué?

Se han producido diversos aspectos positivos para los países de la zona:

Debido a la presencia de agentes financieros europeos y norteamericanos que acudieron a las privatizaciones de la década de los noventa, el sistema bancario ha gozado el último lustro de una estabilidad importante.  En segundo lugar al tratarse de países exportadores de materias primas, y estas sufrir un alza continuada en los precios a lo largo del siglo XXI, el flujo de entrada de divisas por las exportaciones se ha incrementado año tras año.

Finalmente Latinoamérica ha basado un fuerte crecimiento económico en la demanda importante y continuada de países europeos y EEUU.  Desde finales del 2007 todas estas características están viviendo su reverso contrario:  El descenso continuado de la demanda de países occidentales ha motivado que en el último trimestre del 2008 los datos de crecimiento hayan sufrido caídas muy importantes frente al mismo periodo del año anterior Brasil (1,2% vs 6,8%), México (-1,7% vs 1,7%),  Chile (0,2% vs 4,6%) y globalmente hablamos de pasar de cifras del 1,1%  a principios de año frente a más 4% del 2007.

Posteriormente la caída de su mercado tradicional (EEUU) y la drástica modificación de flujos de capital llegados de Norteamérica están produciendo una depreciación acusada en las monedas locales (peso o real) frente al USD.

Finalmente un barril de crudo por debajo de USD50 desbarata completamente presupuestos nacionales que en sus peores escenarios contemplaban  cotizaciones de USD75.

Las crisis sistémicas del 2001 y 2002 se habían olvidado ¿Vivirá Latinoamérica un ejercicio 2009 en decrecimiento? ¿Qué sucederá con los flujos de capital extranjero y remesas de emigrantes en EEUU y Europa?

24
Abr

Ya están aquí… los 4 millones de parados

Escrito el 24 abril 2009 por Valentín Bote en Economía española

El INE acaba de dar a conocer  hace apenas diez minutos los datos de la EPA correspondientes al primer trimestre de 2009. Los datos son tan malos que no merece la pena un post largo analizando cada uno de ellos. Invito a los lectores a que accedan a la página web del Instituto Nacional de Estadística y lean la nota de prensa, eso sí, siempre que no padezcan de corazón. Aquí tienen el link: http://www.ine.es/daco/daco42/daco4211/epa0109.pdf

Baste decir que algo que hace muy pocos meses desde el Gobierno se negaba que pudiera suceder, el que en España alcanzásemos los 4 millones de parados, ya lo tenemos convertido en realidad, concretamente 4.010.700 personas están en paro tras el primer trimestre de 2009, y en más de 1 millón de hogares todos los miembros activos están desempleados. La tasa de paro se ha incrementado hasta el 17,4%, por encima de las previsiones. En el último año el paro se ha incrementado en 1,84 millones de personas y se han destruido 1,31 millones de empleos.

Estos datos ponen a la economía y al mercado de trabajo españoles ante una situación tan dramática que resulta inexcusable empezar a replantearse de manera urgente una serie de reformas sobre las que se lleva muchos años sin entrar en el debate público, por ser «políticamente incorrectas». Pues bien, esta misma semana hemos conocido un manifiesto denominado Propuesta para la Reactivación Laboral en España, firmado por casi 100 economistas de gran prestigio en nuestro país, algunos de ellos muy próximos al Gobierno o que, incluso, ocupa cargos por nombramientos del actual ejecutivo. Se trata de un clamor que no responde a posicionamientos políticos, sino a la responsabilidad de los académicos que lo han apoyado. En dicho manifiesto se aboga por una reforma integral del actual Estatuto de los Trabajadores, en cuatro direcciones: reforma y simplificación de los modelos de contratación, reforma de la negociación colectiva, reforma de las prestaciones por desempleo y modificación de las políticas activas.

Este manifiesto prácticamente ha coincidido en el tiempo con un nuevo informe del FMI en el que nuestras previsiones de crecimiento (quizá es más preciso hablar de decrecimiento) vuelven a empeorar y nos sitúan en recesión también en 2010.

Mientras tanto, el pasado martes el Ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, pronunció una conferencia de más de media hora, bajo el título El mercado laboral en España: Medidas para afrontar la situación actual del empleo, en la que no se hizo ni una sola mención a la necesidad de una reforma laboral. Esta situación hasta nos obliga a recordar con añoranza el año 1994, en el que ante una profunda, aunque mucho menos que la actual, crisis económica, el gobierno de González asumió la responsabilidad de gobernar, emanada de las urnas, y aprobó una reforma laboral para ayudar a paliar la crisis, aun sin contar con el consenso de los agentes sociales.

Mientras se sigue sin hacer nada, ya hemos pasado la barrera de los 4 millones de parados. ¿Para cuándo los 5 millones?

23
Abr

Necesitamos de ideas

Escrito el 23 abril 2009 por María Jesús Valdemoros en Miscelánea

Las recientes declaraciones del gobernador del Banco de España en su comparecencia ante la Comisión no permanente de seguimiento y evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo, han levantado una polémica importante. Sin entrar en el contenido de esas declaraciones, ni en la controversia general acerca de la sostenibilidad del actual sistema de pensiones, sí me gustaría plantear algunas reflexiones sobre lo sucedido, que no es sino repetición de algo muy habitual en nuestra sociedad.

¿Sabemos discutir?

Vivimos en un país donde resulta muy difícil en ocasiones imposible- iniciar y mantener debates rigurosos, basados en el análisis sosegado de las distintas posturas, argumentos y propuestas. Con enorme facilidad y rapidez caemos en la tentación de descalificar a los demás desde planteamientos meramente partidistas o ideológicos. Es como si en nuestra cultura a diferencia de lo que ocurre en otras latitudes- tuviéramos una tendencia irrefrenable a identificar ideas con personas. Así, las críticas a las acciones u opiniones de alguien se toman inmediatamente como ataques personales. O al contrario, esto es, atacamos a la persona con la pretensión de que con ello conseguimos demostrar lo erróneo o malintencionado de sus opiniones. Los méritos o deméritos de los argumentos quedan eclipsados por el ruido que acompaña al supuesto debate.

Este mal es palpable en muchos ámbitos. Está al orden del día en el de la política económica, donde se manifiesta de las más diversas formas. Creo que, por ejemplo, lo hace en la habitual falta de estudios y evaluaciones sobre las consecuencias de las medidas de política adoptadas. No hay autocrítica, y así es muy difícil debatir de manera productiva. En política económica, parece que lo que hace el gobierno o lo que plantea la oposición es o bien totalmente malo, o bien totalmente bueno. No hay matices, no hay análisis detallado, no hay auténtica discusión (Discutir viene del latín discutĕre, que significa disipar, resolver y no reñir ni chillar).

Seamos optimistas

Pero hay motivos para la esperanza. La crisis que padecemos parece que puede devolver valor a la cultura del esfuerzo, la sobriedad, etc.

También está dando lugar a que surjan propuestas y nuevas ideas con las que hacer frente a una situación económica tan distinta de aquella a la que nos habíamos acostumbrado. Sin ir más lejos, 100 economistas españoles de prestigio lanzaban el otro día un manifiesto para la reforma del mercado laboral.

Ojalá ejemplos como éste se multipliquen y alienten un debate profundo, serio, sin prejuicios, que nos ayude a mejorar como economía y como sociedad. Un debate abierto a todos, pero en el que no todo valga: valen las ideas y los argumentos.

22
Abr

Las nuevas previsiones que acaba de publicar el FMI suponen un jarro de agua fría para los optimistas que ya estaban anticipando una recuperación a la vuelta de la esquina. Según el organismo supranacional, el camino hasta la reactivación va ser duro, largo y sujeto a una elevada incertidumbre. A juzgar por sus previsiones, el crecimiento potencial en los principales países no se alcanzará hasta 2011. El FMI presenta un escenario bastante realista para 2009 y anticipa una contracción del PIB mundial del 2,5% (-1,3% agregado según criterio PPA). Entre las economías desarrolladas destacan negativamente Japón (-6,2%) y Alemania (-5,6%) que arrastrará a toda la UEM (-4,2%); y, entre las emergentes, Rusia (rebaja en 5 p.p. su estimación de enero), además de  México y Brasil (-3 p.p. respecto a enero). En positivo sólo destaca la confianza hacia las dos grandes economías asiáticas, China (6,5% en 2009) e India (4,5% en 2009). En el caso de España, sus previsiones están próximas a las publicadas recientemente por el Banco de España (-3% en 2009 y -0,7% en 2010).

El deterioro es generalizado y afecta a todo tipos de países: exportadores, endeudados, con elevada propensión al consumo, etc. El contagio se ha extendido excepcionalmente rápido por los canales real (el comercio mundial caerá un 11% en 2009) y financiero, lo que explica el brusco declive en las expectativas de las principales economías exportadoras asiáticas y en las más dependientes de los flujos de capital (Europa Emergente). La restricción crediticia es especialmente preocupante en las empresas de las economías emergentes. El FMI, considera que las diversas y, en ocasiones, heterodoxas medidas de política económica que se han tomado no han sido suficientemente eficaces para estabilizar los mercados financieros. Aunque han permitido contener las inercias negativas, la confianza en los mercados financieros sigue siendo escasa. Ello cuestiona la posibilidad de una recuperación destacable a corto plazo.

Para 2010 prevé una recuperación muy gradual, característica de todas las crisis financieras. Estima un crecimiento medio positivo del 1,0% (1,9% PPA), gracias a la reactivación de los principales países emergentes y condicionado a la normalización del sector financiero y al apoyo de las políticas de estímulo fiscales y monetarias. Hace un llamamiento a la coordinación internacional y alerta de los riesgos de retomar tendencias proteccionistas. Es importante destacar que cuestiona la capacidad de reactivación de EEUU (no ve crecimiento), al igual que de la mayor parte de principales economías desarrolladas, que se estancarán o incluso seguirán en contracción (como es el caso de la UE).

Además, el FMI ha vuelto a publicar su Informe de Estabilidad Financiera, que desde el inicio de la crisis se ha erigido en una herramienta fundamental de análisis para intentar entender lo qué está ocurriendo en el sector financiero. De hecho, en este informe ya se advertía antes del verano de 2007 del exceso de apalancamiento de los agentes, de la inadecuada valoración de los riesgos, etc. En el Informe de Estabilidad  se elevan las pérdidas potenciales del sector financiero mundial por la crisis hasta 4,1 billones de dólares, dos tercios de los cuales corresponderán a los bancos. Los activos originados en EEUU (2,7 billones) y en Europa (1,2 billones) son los responsables de la mayor parte de estas pérdidas. Esta revisión responde al empeoramiento de las perspectivas de crecimiento a nivel mundial. Es decir, estaríamos entrando en la tercera etapa de esta crisis, cuando el deterioro de la actividad y el empleo impactará sobre los estados financieros del sistema bancario. Si los balances bancarios no se depuran a fondo para eliminar los activos deteriorados y si no se procede a la reestructuración (y de ser necesario a la recapitalización), persistirá el riesgo de que los problemas de los bancos continúen empujando la actividad económica a la baja. Es más, sin una normalización del canal financiero, la efectividad de la política económica anticíclica es limitada.

En definitiva, existe el riesgo de sobrevalorar los «tallos verdes» («green-shoots») que trae consigo la llegada de la primavera. Después del desplome de la actividad que se produjo a finales del año pasado y primeros meses de 2009, es normal, que el ritmo de deterioro se esté frenando. Pero estamos hablando exclusivamente de la segunda derivada, eso no es lo mismo que tocar fondo y, mucho menos, que recuperar los ritmos potenciales de crecimiento. Para ello me temo que todavía deberemos esperar un tiempo.

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